Si bien cada situación tiene sus propias complejidades y particularidades, los teóricos de sistemas complejos en the New England Complex Systems Institute tienen la hipótesis de que el continuo aumento de los altos precios mundiales de los alimentos podría ser un factor importante de estos ”levantamientos” en todo el mundo. Hace más de un año , Yaneer Bar-Yam del NECSI publicó un documento donde trazaba el aumento del índice de precios alimentarios de la FAO - una medida de la ONU que asigna costos de los alimentos a través del tiempo - y vió que cada vez que esa cifra se elevaba por encima de 210, estallaban disturbios en todo el mundo. La hipótesis resultó cierta para el colapso económico de 2008 y para las protestas tunecinas de 2011. Después de que Bay-Yam costruyera el modelo, fue capaz de predecir la primavera árabe a sólo semanas antes de que sucediera.
"Tengo una larga lista de los países que han tenido un grave malestar social en los últimos 18 meses, en consonancia con nuestras proyecciones", dijo Bar-Yam ."Los precios de los alimentos son sin duda un factor importante - nuestro análisis dice que el 210 en el índice de la FAO es el punto de ebullición y hemos estado rondando sobre ese punto durante los últimos 18 meses."
¿Y quién está en esa larga lista de países a punto de estallar: Sudáfrica, Haití, Argentina, Egipto, Túnez, Brasil, Turquía, Colombia, Libia, Suecia, India, China, Bulgaria, Chile, Siria, Tailandia, Bangladesh, Bahrein, Ucrania, Venezuela, y Bosnia. Cada uno de estos países han visto una subida de precios de los alimentos, y si bien ese no es el único factor que conduce a los disturbios y motines, el hambre ha demostrado a menudo ser la chispa que enciende el fuego.
Y resulta que ahora los precios de los alimentos han aumentado.