(Varsovia, Reuters/EP, 24/08/2011)
Las relaciones bilaterales entre Polonia, que actualmente preside la Unión Europea hasta que finalice el año, y Lituania son muy tensas. 
El primer ministro de Lituania, Andrius Kubilius, ha denunciado casos de incitación al odio racial en Polonia después de la aparición de pintadas con palabras en lituano con los colores de la bandera de Polonia.
Las relaciones bilaterales entre Polonia, que actualmente preside la Unión Europea hasta que finalice el año, y Lituania son muy tensas en cuanto a la cooperación económica y a causa del tratamiento de Varsovia y Vilna de las respectivas minorías étnicas.
La minoría lituana en Polonia asciende a 25.000 personas, que viven en su mayoría en el noreste del país, donde algunas ciudades cuentan con signos en ambas lenguas, tal y como estipula la ley polaca.
Muchos de estos signos han aparecido en el barrio de Punsk, cerca de la frontera con Lituania, pintados con los colores blanco y rojo -los que conforman la bandera polaca-, mientras que un monumento memorial lituano ha aparecido cubierto con símbolos nacionalistas polacos.
“Lo que hemos visto en los informes televisivos en Punsk no es nada más que incitación al odio racial, y muy clara además”, ha señalado Kubilius. Varsovia, que ha protestado largamente por el tratamiento de Vilna a la minoría étnica polaca en el país en asuntos como la ortografía de los nombres y disputas sobre territorio y educación, ha asegurado que se trata de la obra de un gamberro que ha violado la ley.
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