El mayor problema del presidente de la Reserva Federal, Jerome H. Powell, es que está comenzando su trabajo con poco personal, con solo tres de los siete puestos de gobernador de la Fed ocupados. (Joshua Roberts / Reuters)
Jerome H. Powell, el nuevo presidente de la Reserva Federal, hizo su aparición pública el martes, donde le dijo al Comité de Servicios Financieros de la Cámara que está comprometido a “explicar claramente” el pensamiento de la Reserva Federal. En las observaciones preparadas, Powell dijo que la economía de Estados Unidos está bien y que el reciente nerviosismo en el mercado bursátil no le preocupa. Reiteró que la Fed tiene la intención de aumentar las tasas de interés a un ritmo lento y constante, similar a sus movimientos con su predecesora, Janet L. Yellen.
Powell tiene uno de los trabajos más difíciles en Washington en este momento. Tiene que mantener la calma de Wall Street, el desempleo bajo y la inflación bajo control, todo mientras enfrenta la presión del presidente Trump. Si bien la Fed es una entidad independiente sobre la cual Trump no tiene control directo, Powell es un candidato de Trump, y el presidente ha dejado en claro que quiere un crecimiento económico más rápido y un mercado de valores en auge.
El presidente de la Fed trató de asegurar a Estados Unidos que puede recorrer esa línea entre dejar crecer el crecimiento después de los recortes tributarios de Trump, pero no dejar que la economía se caliente tanto que existe el peligro de un colapso.
La Fed “continuará buscando un equilibrio entre evitar una economía sobrecalentada y llevar la inflación de los precios de PCE al 2 por ciento sobre una base sostenida”, dijo Powell. “Más aumentos graduales en la tasa de fondos federales promoverán mejor el logro de nuestros dos objetivos. “
Sus comentarios sugieren que aún piensa que la Fed debería aumentar las tasas de interés tres veces en 2018, aunque sonaba optimista sobre la economía. Los comerciantes y economistas de Wall Street predicen abrumadoramente un aumento de tasas en la próxima reunión de la Fed el 21 de marzo.
Al elevar las tasas de interés, la Fed busca enfriar la economía y evitar la inflación, y los inversores están escuchando atentamente cualquier señal de que Powell pretenda aumentar el ritmo de las alzas de tasas.
Existe una preocupación creciente de que la economía podría sobrecalentarse después de los recortes de impuestos y el aumento masivo en el gasto gubernamental que el Congreso acaba de aprobar. El multimillonario gestor de fondos de cobertura Ray Dalio, que predijo correctamente la crisis financiera, ahora ve un 70 por ciento de posibilidades de una recesión antes de las elecciones presidenciales de 2020.
“Powell va a pecar de cauteloso”, dijo Joseph LaVorgna, economista jefe del banco de inversión Natixis. “Sería un error insinuar cuatro subidas de tasas este año. Si la Fed hizo cuatro alzas, la curva de rendimiento probablemente se invierta, y eso enviaría un signo ominoso “.
Los temores de que la economía y la inflación se descontrolaran desencadenaron la ola de ventas en el mercado de valores a principios de febrero. El Dow Jones perdió 666 puntos en el último día de la presidencia de la Fed, Yellen, y sumó casi 1.200 puntos , el mayor descenso de un solo día en la historia del mercado, en el primer día oficial de Powell el 5 de febrero. Pero desde entonces ha recuperado la mayoría de las pérdidas.
Wall Street a menudo prueba nuevas sillas de la Fed con caídas del mercado, y Powell, un abogado y ex ejecutivo de capital privado, quiere demostrar que puede manejar el trabajo que normalmente ha tenido economistas de doctorado. Se encogió de hombros ante las recientes caídas como comportamiento típico del mercado que tiene poco o ningún impacto en la economía en general.
“En este momento, no vemos que estos desarrollos pesen mucho en las perspectivas de la actividad económica, el mercado laboral y la inflación”, dijo Powell, quien agregó que le gusta tener indicadores claros de lo que la Fed quiere ver antes de elevar las tasas. “Personalmente, creo que estas reglas son útiles”.
Powell sigue siendo optimista sobre la economía de Estados Unidos en general. En un aparente guiño a Trump, el presidente de la Fed señaló que la economía se expandió “alrededor del 3 por ciento” (objetivo de Trump) en la segunda mitad de 2017, y las empresas están empezando a gastar más en nuevas fábricas, equipos y tecnología.
“El crecimiento en la inversión empresarial aumentó drásticamente el año pasado, lo que debería respaldar un mayor crecimiento de la productividad en el tiempo”, dijo.
Si bien no mencionó explícitamente los recortes de impuestos, caracterizó una economía en crecimiento con una inflación que probablemente “subirá este año y se estabilizará” en torno al objetivo del 2 por ciento de la Reserva Federal.
“Powell no pronunciará la palabra ‘Goldilocks’, pero lo haremos”, dijo Greg Valliere, estratega jefe global de Horizon Investments.
El presidente nominó a Powell, un republicano con una reputación en Washington como un generador de consenso, con la esperanza de que el nuevo presidente de la Reserva Federal mantendría bajas las tasas de interés para que el crecimiento económico repunte. El equipo de Trump pronostica un crecimiento del 3 por ciento cada año durante la próxima década, una hazaña que pocos economistas creen que sucederá.
Pero es posible que el crecimiento llegue al 3 por ciento en 2018. La Fed pronostica un crecimiento del 2.5 por ciento este año, pero ese pronóstico se realizó antes de la aprobación final de la factura tributaria y el aumento en el gasto aprobado por el Congreso.
“Creemos que la Fed elevará su pronóstico del PIB para 2018 a algo cercano al 3 por ciento, a pesar del pico preocupante de los niveles de deuda del consumidor”, predice Valliere.
En diciembre, la Fed proyectó tres alzas de tasas este año, pero poco más de un cuarto de los economistas predicen que la Fed terminará haciendo cuatro (o más) aumentos este año.
El mayor problema de Powell es que está comenzando su trabajo con poco personal. Solo tres de las siete posiciones de gobernador de la Fed están ocupadas, lo que significa que Powell tiene un equipo disminuido en un momento en que la Fed necesita vigilar muchas áreas de los mercados y la economía.
Trump nominó a otra persona, el economista Marvin Goodfriend, para servir como gobernador de la Reserva Federal, pero el Senado está en la mira por confirmarlo. Todos los demócratas en el Comité Bancario del Senado votaron en contra de Goodfriend el día que su nominación se sometió a votación en el comité. El senador Rand Paul (republicano por Kentucky) también ha dicho que votará en contra de Goodfriend. Un “no” más de un senador republicano condenaría a Goodfriend.
La Fed todavía carece de vicepresidente porque Trump aún no ha nominado a nadie.
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https://www.washingtonpost.com/news/wonk/wp/2018/02/27/fed-chairman-in-public-debut-vows-to-prevent-overheated-us-economy/