Se nos va el rey con un patrimonio que se acerca a los los 2.000 millones (The New York Times, por cierto; no La Tuerka). No estámal para los servicios prestados. Toca a un beneficio de 50 millones al año, cifra que se eleva sutilmente por encima del salario mínimointerprofesional. En estos tiempos de loas generalizadas a este señor claroscuro, hay que aplicarle también a su campechana majestad el baremo del tanto vales tanto tienes. La prensa extranjera lo estácontando mucho. La española (de papel), menos. Vale mucho un tío que ha amasado una fortuna de casi 2.000 millones en 40 años. Es un crack, o sea. Un manguis-alfa. Pero, en todo caso, yo creo que a Juan Carlos, a razón de cuatro millones mensuales, habría que haberle exigido un poquito más. Por ejemplo, controlar los negocietes de su apuesto yerno, que se ha demostrado incluso mejor metiendo la mano que en el balomnano. Pero lo de meter la mano (no confundir con meter mano, pero también) ha sido siempre una muy loable cualidad de nuestra casta borbónica.
Se nos va el rey con un patrimonio que se acerca a los los 2.000 millones (The New York Times, por cierto; no La Tuerka). No estámal para los servicios prestados. Toca a un beneficio de 50 millones al año, cifra que se eleva sutilmente por encima del salario mínimointerprofesional. En estos tiempos de loas generalizadas a este señor claroscuro, hay que aplicarle también a su campechana majestad el baremo del tanto vales tanto tienes. La prensa extranjera lo estácontando mucho. La española (de papel), menos. Vale mucho un tío que ha amasado una fortuna de casi 2.000 millones en 40 años. Es un crack, o sea. Un manguis-alfa. Pero, en todo caso, yo creo que a Juan Carlos, a razón de cuatro millones mensuales, habría que haberle exigido un poquito más. Por ejemplo, controlar los negocietes de su apuesto yerno, que se ha demostrado incluso mejor metiendo la mano que en el balomnano. Pero lo de meter la mano (no confundir con meter mano, pero también) ha sido siempre una muy loable cualidad de nuestra casta borbónica.