Por fin, sobre el laboratorio de los crímenes más odiosos que registra la Historia, sobre el tenebroso Kremlin, con su Komintern, lleno de asesinos, ha caído, implacable, la justicia humana. Como si una mano invisible hubiera guiado a las alas alemanas, el fuego ha lamido los muros de la fortaleza de Stalin y las bombas germanas han estallado en las Comisarías del pueblo, en los cuarteles del Ejército Rojo y en los centros administrativos soviéticos, donde se incuba la tremenda tiranía bolchevique.
Camaradas,
Durante la noche de hoy, bombarderos alemanes han despegado desde aeródromos cercanos a Smolensko y se han dirigido hacia Moscú. El Comandante de la Defensa Aérea de Moscú, el General Gromadin, ha decretado a las 22:00 horas la primera gran alerta aérea de la guerra en la capital soviética. Otros bombardeos anteriores, como el del pasado 13 de julio, no pasaron de pequeñas incursiones.
El ataque, que se ha prolongado durante varias horas sin interrupciones, prácticamente desde la puesta de sol hasta el amanecer, lo han llevado a cabo 127 bombarderos en varias oleadas que han arrojado 104 toneladas de bombas explosivas y 46.000 artefactos incendiarios sobre Moscú. El Alto Mando Soviético, la Stavka, llevaba días temiéndose el ataque y ha tenido tiempo de preparar sus defensas antiaéreas. Según las tripulaciones de la Luftwaffe, el fuego defensivo sobre Moscú ha sido todavía más poderoso que el que se habían encontrado sobre Londres. A pesar de ello, apenas han salido a su encuentro cazas nocturnos enemigos y nuestros bombarderos no han tenido que lamentar pérdidas, a pesar de que la Stavka ha proclamado a bombo y platillo haber derribado 17.
Se confirma así que la Luftwaffe Alemana ha tenido éxito en instalar bases aéreas en los territorios rusos conquistados, de modo que los bombarderos se encuentran ahora a unos pocos cientos de kilómetros de distancia de Moscú, para horror de Stalin.
Los primeros informes que nos han llegado del ataque aéreo sobre Moscú han revelado que las tripulaciones de bombarderos alemanes que se han aproximado a Moscú en la segunda oleada de asalto han podido ver el mar de llamas que se abatía en la capital soviética mientras todavía se encontraban a 140 kilómetros de Moscú. Uno de los pilotos ha informado que los incendios eran tan grandes y amplios como los que ya había visto antes sobre Manchester o Sheffield, y también ha hablado de la poderosa defensa aérea y dicho que los incesantes destellos de los disparos de la artillería antiaérea podían observarse entre las casas incluso después de que éstas hubieran comenzado a arder.
Por su parte, el Alto Mando de la Wehrmacht ha emitido el siguiente comunicado:
Las operaciones de la Wehrmacht Alemana y sus aliados han roto el frente defensivo soviético en una serie de grupos desunidos. A pesar de la tenaz resistencia y de rabiosos contraataques, ya no se puede distinguir ningún comportamiento unificado por parte del enemigo. Las operaciones para aplastar y aniquilar los grupos individuales de las fuerzas armadas soviéticas están continuando sin descanso en todo el Frente Este.
Anoche, la Luftwaffe atacó Moscú por primera vez como represalia por los ataques aéreos bolcheviques sobre las capitales aliadas de Bucarest y Helsinki. Poderosas formaciones de bombarderos alemanes con excelente visibilidad han bombardeado las instalaciones militares y los centros de comunicaciones y municiones moscovitas. Impactos directos de bombas han provocado un sinfín de incendios en el distrito del Kremlin y alrededor del meandro del Río Moskva. Así mismo, los edificios de los cuarteles generales soviéticos y oficinas del gobierno han resultado destruidos o gravemente dañados, así como las fábricas de suministros.
Bomben auf Moskau!Sieg Heil!