Autor: Christine Feehan Incluso para Mihail, príncipe de la legendaria raza de los carpatianos, la soledad se vuelve insoportable con el paso de los siglos. Como todos los hombres de su especie, necesita encontrar a la mujer destinada a ser su compañera eterna, para no ceder a las tinieblas y engrosar las filas de los que se han convertido en depredadores. Por eso su alegría es inmensa cuando contacta telepáticamente con una mujer excepcional. Alguien que puede leer la mente, como los carpatianos. Pero su sorpresa es inmensa al conocer que se trata de una humana. Raven es hermosa, valiente, decidida... y enseguida queda prendada del majestuoso poder de Mihail. Pero ¿podrá aceptar la realidad de una raza tan parecida a los vampiros de las leyendas? Para saberlo, tendrán que sobrevivir tanto a la oscura amenaza de los seres de la noche como a la violencia de un grupo de fanáticos humanos. Cuando escogemos una novela para leer lo hacemos por diferentes motivos: nos gusta el género, nos encanta el autor, nos atrae su argumento; hay quienes incluso, han comprado libros por su atrayente portada...Desde hace algunos años -exactamente desde que comencé a escribir- la elección de mis lecturas ha ido tomando forma según he ido necesitando información y documentación para mis novelas. Este es el caso de haber escogido El príncipe oscuro, una novela que, a parte de estar relacionada con el mito del vampiro, es de una autora consagrada y forma parte de una serie de enorme éxito; por este mismo motivo me sorprendió también haber leído que era malísimo y fue precisamente este hecho lo que me decidió a comprarlo. La primera impresión ha sido buena y me ha parecido atrayente y original. Si algo malo tuviera que decir de ella, tal vez sería su empalagosa manera de narrar, cosa que he encontrado extraña, ya que no es la primera novela de Christine Feehan que leo y lo poco que había leído de ella hasta ahora lo encontraba bastante simplón, sin mucha escritura rocambolesca o empalagosa, como es el caso. Encuentro que es difícil, a veces, leer frases repetitivas y soportar adjetivos exagerados que no vienen a cuento como sus azulísimos ojos, sus muy abultados bíceps, su melena de ébano...; todo eso ya nos lo explicó en un principio y a veces llega a hacerse insoportable el hecho de repetirnos una y otra vez las mismas descripciones con la falsa creencia que le dará más fuerza a sus escenas, cuando en realidad, no le hace falta. Por otro lado, la historia es original. Quizás sea ella la que más se acerca a la figura original del vampiro que necesita de sangre para sobrevivir y descansar bajo tierra para reponerse. Últimamente estamos sobrecargados de vampiros modernos, vestidos de cuero, algunos narrados con mayor o menor fortuna, vampiros que desafían a la luz solar, que pueden escoger cuándo saciar su sed de sangre pero que cada vez nos alejan más del personaje oscuro que creó Bram Stoker. Christine Feehan, en cambio, nos muestra un personaje oscuro, con inmenso poder; una criatura que se alimenta de sangre humana, que se transforma en bestia, que mata si es necesario para proteger a su clan, egoísta y posesivo; un héroe al que nos tienen poco acostumbrados. En definitiva, una serie que hay que descubrir y darle una oportunidad. Yo ya tengo el segundo libro en mi estantería.
Autor: Christine Feehan Incluso para Mihail, príncipe de la legendaria raza de los carpatianos, la soledad se vuelve insoportable con el paso de los siglos. Como todos los hombres de su especie, necesita encontrar a la mujer destinada a ser su compañera eterna, para no ceder a las tinieblas y engrosar las filas de los que se han convertido en depredadores. Por eso su alegría es inmensa cuando contacta telepáticamente con una mujer excepcional. Alguien que puede leer la mente, como los carpatianos. Pero su sorpresa es inmensa al conocer que se trata de una humana. Raven es hermosa, valiente, decidida... y enseguida queda prendada del majestuoso poder de Mihail. Pero ¿podrá aceptar la realidad de una raza tan parecida a los vampiros de las leyendas? Para saberlo, tendrán que sobrevivir tanto a la oscura amenaza de los seres de la noche como a la violencia de un grupo de fanáticos humanos. Cuando escogemos una novela para leer lo hacemos por diferentes motivos: nos gusta el género, nos encanta el autor, nos atrae su argumento; hay quienes incluso, han comprado libros por su atrayente portada...Desde hace algunos años -exactamente desde que comencé a escribir- la elección de mis lecturas ha ido tomando forma según he ido necesitando información y documentación para mis novelas. Este es el caso de haber escogido El príncipe oscuro, una novela que, a parte de estar relacionada con el mito del vampiro, es de una autora consagrada y forma parte de una serie de enorme éxito; por este mismo motivo me sorprendió también haber leído que era malísimo y fue precisamente este hecho lo que me decidió a comprarlo. La primera impresión ha sido buena y me ha parecido atrayente y original. Si algo malo tuviera que decir de ella, tal vez sería su empalagosa manera de narrar, cosa que he encontrado extraña, ya que no es la primera novela de Christine Feehan que leo y lo poco que había leído de ella hasta ahora lo encontraba bastante simplón, sin mucha escritura rocambolesca o empalagosa, como es el caso. Encuentro que es difícil, a veces, leer frases repetitivas y soportar adjetivos exagerados que no vienen a cuento como sus azulísimos ojos, sus muy abultados bíceps, su melena de ébano...; todo eso ya nos lo explicó en un principio y a veces llega a hacerse insoportable el hecho de repetirnos una y otra vez las mismas descripciones con la falsa creencia que le dará más fuerza a sus escenas, cuando en realidad, no le hace falta. Por otro lado, la historia es original. Quizás sea ella la que más se acerca a la figura original del vampiro que necesita de sangre para sobrevivir y descansar bajo tierra para reponerse. Últimamente estamos sobrecargados de vampiros modernos, vestidos de cuero, algunos narrados con mayor o menor fortuna, vampiros que desafían a la luz solar, que pueden escoger cuándo saciar su sed de sangre pero que cada vez nos alejan más del personaje oscuro que creó Bram Stoker. Christine Feehan, en cambio, nos muestra un personaje oscuro, con inmenso poder; una criatura que se alimenta de sangre humana, que se transforma en bestia, que mata si es necesario para proteger a su clan, egoísta y posesivo; un héroe al que nos tienen poco acostumbrados. En definitiva, una serie que hay que descubrir y darle una oportunidad. Yo ya tengo el segundo libro en mi estantería.