"El Príncipe Rana", de Ulf Stark y Silke Leffler

Publicado el 11 febrero 2015 por Lidiacasado


Título: El Príncipe Rana
Autor: Ulf Stark
Ilustradora: Silke Leffler
Editorial: Ikea
Género: álbum ilustrado, literatura infantil
Páginas: 32
Publicación: 2014

 Un hada gruñona ha lanzado un sortilegio sobre el príncipe Karl. Un día, mientras juega en el Bosque Encantado, de pronto se transforma en rana. La princesa Klara hace todo lo posible por encontrar a sus amigos y salvarlos. ¡Participa en esta aventura y descubre su historia!
  Lo de besar a la rana para que se convierta en príncipe es uno de los recursos más sanvalentineros que existen, así que aprovecho el tópico para hablarte, justo esta semana, de este cuento que me tiene robado el corazón. Porque sí, muchas veces hemos visto a princesas besar a ranas en busca del príncipe azul pero... ¿alguien sabe por qué el príncipe se había vuelto rana?
   Ulf Stark e Ikea nos ofrecen una posible respuesta, muy acorde con la tradición oral: la maldición de un hada gruñona. Lo mejor es la condición que añade para que tal maldición se materialice. Si en el caso de la Bella Durmiente, el desencadenante era un huso, aquí lo peor que puede hacer el muchacho es pasárselo bien. Y, claro, si uno va de visita a casa de la princesa Klara es muy difícil no pasárselo bien.

Foto: Ikea

   Como ya ocurriera en La princesa y la felicidad, Klara vuelve al Bosque de los Cuentos en busca de respuestas, en este caso, la de cómo invertir el proceso de su amigo. Nuevos personajes clásicos, nuevas aventuras y los mismos peluches del cuento anterior (excepto por el del príncipe rana, claro) para contar una historia que he comprobado, siempre que la he contado, que a los más pequeños les encanta. Quizá parte de la culpa la tenga ese peluche mitad rana, mitad príncipe (y que se convierte en rana o en príncipe dependiendo de qué parte guardes dentro de la otra) que hace muy visual el cambio de estado del protagonista.

Foto: Ikea

   Además de la historia, de las ilustraciones (que me encantan) y de su precio, más alicientes de este libro son que Ikea dona un euro a Unicef y que entre los extras se encuentran no solo los peluches, sino un juego de cartas que también gusta mucho a los niños. Resultado: irresistible (al menos para mí, claro).
   Nos seguimos leyendo.