El Principito en Argentina

Por Canaltourtv @CanalTourTv

Como todo aviador, Antoine de Saint-Exupéry era un apasionado de las aventuras. Sus viajes en avioneta lo solían llevar a destinos insospechados, y así fue como el escritor francés llegó a Concordian en la provincia argentina de Entre Ríos. La familia Fuchs Valon, dueños en ese entonces del castillo San Carlos, recibió a Antoine de Saint-Exupéry cuando este aterrizó por accidente en los jardines de su hogar. Con una rueda averiada, el autor decidió pasar varios días junto a la familia, hasta reparar su avioneta.

Esta entrada que parece propia de los cuentos era muy común en la vida de Antoine de Saint-Exupéry, acostumbrado a hospedarse en lugares desconocidos y explorar territorios. La familia sin embargo, se sorprendió ante el acento francés del piloto que apareció de repente en su jardín.

“Se respiraba como si fuese incienso el olor de vieja biblioteca” escribiría más tarde Antoine de Saint-Exupéry sobre el momento en el que ingresó al castillo. El fotógrafo Sebastian Mangione nos brinda estás imágenes de las ruinas del hogar de los Fuchs Valon en la actualidad:

El castillo de San Carlos cautivó tanto a Antoine de Saint-Exupéry que siguió visitando el lugar incluso después de que la familia Fuchs Valon se trasladó a otra residencia. A modo de homenaje, en la actualidad puede verse una estatura de El principito en el parque que rodea las ruinas.

Fue durante su estancia en el castillo cuando el autor escribió “Las princesitas argentinas”, inspirándose en las dos hijas de la familia. En el libro “Tierra de hombres” describe de manera muy poética su aterrizaje en el castillo: “había aterrizado en un campo y no sabía que iba a vivir un cuento de hadas: fue en un campo cerca de Concordia, en la Argentina”.

El autor se inspiró de esta mítica visita para escribir los hechos que acontecen en El Principito, donde un piloto se ve perdido en un desierto y se encuentra con un joven príncipe que procede de otro planeta.