'El rebelde desconocido'

A veces, en el fragor de la batalla, se abre paso un silencio. No importa la potencia de los tanques que vienen decididos a aplastarnos. Tal es la historia del hombre anónimo, o del hombre del tanque, durante aquella revuelta de la Plaza de Tiananmen en 1989. La foto de Jeff Widener dio la vuelta al mundo en periódicos y revistas.
Y en cada lado se adaptó de una forma: el gobierno de aquel país la tomó como símbolo del cuidado de los soldados del Ejército Popular de Liberación para proteger al pueblo chino y en Occidente se habló de un movimiento democrático chino, y con parecido énfasis fue explicado el caso entre las democracias liberales, que resaltaron el enorme poder del individuo.
Dicen las crónicas que cuando los tanques se detuvieron, el hombre se subió a uno de ellos y habló con el conductor. Al hombre desconocido se le adjudican frases como '¿Por qué están aquí?', 'Mi ciudad es un caos por su culpa'; 'Retrocedan, den la vuelta y dejen de matar a mi gente'; o 'Váyanse'... pero más allá de cualquier especulación sobre si esa conversación existió o si se utilizaron esas palabras, lo importante es lo que implica el hecho: Un hombre desarmado, sin temor a la muerte, se ofrece como bandera blanca. Ya puestos a dilucidar, seguro que pensó: 'Si no puedo ser libre, no importará que los tanques me arrastren'.
Acciones y reacciones

En abril de 1998, la revista estadounidense Time, incluyó al 'Rebelde Desconocido' en su lista de las cien personas más influyentes del siglo XX.
El tabloide británico The Sunday Express afirmó que su nombre es Wang Weilin, un estudiante de 19 años, aunque no pudo confirmarse la noticia.
Bruce Herschensohn (ayudante del presidente de los EEUU Richard Nixon) afirmó que fue ejecutado dos semanas más tarde.
Jan Wong, en el 'Blues de la China Roja', asegura que vive allí y que sigue escondido.
Charlie Cole, fotógrafa de la revista Newsweek, testigo ocular de los hechos, asegura que fue arrestado.
En 1992, Barbara Walters pregunta a Jiang Zemin, Secretario General del Partido Comunista, qué pasó con el hombre del tanque, a lo que Jiang contestó: 'Creo que nunca se le mató'.
En un artículo publicado en 2006 en el Hong Kong Apple Daily se afirma que el hombre estaría residiendo en Taiwán.

La imagen fue captada el cinco de junio de 1989 por al menos tres fotógrafos desde los balcones del Hotel Beijing, junto a la plaza de Tiananmen: Los estadounidenses Jeff Widener, (imagen de la izquierda) para la agencia Associated Press (AP), Charlie Cole, para la revista Newsweek, y el británico Stuart Franklin, de Magnum, para la revista Time. La fotografía de Widener es una de las más reconocidas, y fue tomada con una Nikon y una lente de 300 milímetros desde un balcón a unos 200 metros de la escena. La noche anterior el fotógrafo había sido asaltado y agredido por la policía china que le requisó el material captado de la represión contra los estudiantes. Por eso al poco de tomar las imágenes del hombre frente al tanque, escondió el carrete en la cisterna del inodoro. Y pese al registro de su habitación, logró sacar la foto y enviarla a su redacción.

Para saber más: Página de "Jeff Widener" "El Rebelde Desconocido en Wikipedia"