El recorrido de la Marcha cicloturista La Reina Road (IV)
Vamos, vamos, desperézate y lánzate a la carretera a entrenar, que ahora hay un montón de marchas cicloturistas espectaculares en las que podrás conocer nuevas carreteras, afrontar nuevos retos y ascender puertos preciosos que, quizás, no sabías ni siquiera que existían. Coge tu bici y lánzate a devorar kilómetros, retos tan atractivos como La Reina Road te están esperando, y Merkabici como siempre te ayuda a superarla con la información más completa de todo el recorrido.
Tan completa que estos días pasados hemos llegado hasta el Pantano de Riaño después de superar ya dos puertos (vale, no eran de los duros, pero los llevas en las piernas) y un terreno de repechos de gran dureza que puede dejarte tocado para el resto de la jornada. Pero para que puedas afrontar lo que queda con todas las garantías, con el mejor de los ánimos, vamos a proceder a dejarte clarita cada curva del recorrido. Porque, siempre te lo decimos, así no podrás buscar luego excusas, jejeje.
Y así seguimos, por una zona de continuos toboganes, siempre al borde del pantano de Riaño. Eso sí, el lugar es paradisiaco, y las increíbles vistas de unos Picos de Europa que parecen casi tan cercanos que podrías tocarlos con la punta de los dedos van a entretener tu recorrer, quizás ya algo penoso, por esta zona. Tranquilo, dentro de poco estarás en plenos Picos de Europa, afrontando una de las carreteras más alucinantes que puedas imaginar.
Así llegamos al comienzo de la subida al Puerto del Pontón, una de las ascensiones tradicionales desde la cornisa cantábrica a la Meseta. Eso sí, no tengas miedo, porque por esta vertiente resulta poco menos que un repecho de apenas un kilómetro de longitud. Poca cosa, ¿verdad?…pero no te puedes relajar porque lo que estamos haciendo en realidad es afrontar la parte decisiva de esta marcha cicloturista, un sube y baja mortífero que puede dejarte sin fuerzas si te encuentras con poco entrenamiento…o con un desarrollo insuficiente…
Y es que pronto enlazamos con el puerto de Panderrueda, otro de los más conocidos de la Cordillera, que tampoco tiene gran dificultad por esta vertiente, pero que empieza a hacerse pesado por la acumulación de kilómetros y pendientes…y es que ya llevamos cien kilómetros en las piernas y eso se nota.
Panderrueda no es, como decimos, ningún coco por esta vertiente, presentando poco más de tres kilómetros de ascenso, siendo el primero de ellos el más duro, con rampas de hasta el ocho por ciento y una media apenas inferior a esa cifra. Después el puerto va decayendo en dureza hasta coronar con medio kilómetro prácticamente llano que agradecerás mucho. Decayendo en dureza pero no en belleza, porque vamos a afrontar uno de los lugares más privilegiados de toda la Cordillera, un verdadero mirador natural donde podrás disfrutar de la majestuosidad de los Picos de Europa en toda su grandeza. Además la carretera, aunque algo rugosa, acompaña y carece de grandes dificultades, por lo que el ascenso puede hacerse con una cierta comodidad.
Ahora estás a más de 1400 metros y se extiende ante ti un enorme descenso. Perfecto asfalto y tendencia rectilínea, con solo algunas curvas complicadas se abren para los cicloturistas, en una de esas bajadas que gozan los más técnicos y pueden llegar a desesperar por su longitud a los que no se encuentran cómodos en este tipo de descensos.
Y es que serán más de diez kilómetros de descenso técnico y empinado en algunas partes hasta llegar a Posada de Valdeón, punto de comienzo del siguiente puerto, el más duro de la jornada, el gran coco: el Puerto de Pandetrave.
Pero estamos tan cansados que eso te lo vamos a contar mejor mañana…porque hoy nos da miedo que nos fallen las piernas.