Por emocionante y por lo acertado les compartimos las palabras de Tony Visconti, el productor de cabecera del llorado David Bowie, en cuyas manos estuvo plasmar la visión final del genio. Entre Tony y David habían muchos puentes y algún desencuentro muy propio de entes de ese nivel. Fiel hasta el último día, Visconti calló lo que hoy es un hecho consumado: Caía el ocaso en la vida de Bowie, asomando en el horizonte esa estrella negra que hoy lo abarca todo. Estas son las palabras que mejor definen este momento aciago en la historia de la música.
Tony Visconti: “Siempre hizo lo que quiso. Y quiso hacerlo a su manera y hacerlo de la mejor manera. Su muerte no ha sido diferente de su vida: una obra de arte. Hizo “Blackstar” para nosotros, su regalo de despedida. Durante un año supe que esta era la manera en que se marcharía. Sin embargo, no estaba preparado para ello. Fue un extraordinario hombre, lleno de amor y vida. Siempre estará con nosotros. Pero ahora, es apropiado llorar”.
'Su muerte no ha sido diferente de su vida: una obra de arte'