Cuando me enteré de que Eloy Moreno sacaba nueva novela no tenía dudas, sabía que se iba a colar entre mis próximas lecturas y es que la manera de escribir de este autor me gusta mucho porque en todas sus novelas hay un crítica social, una historia que nos lleva a la reflexión y unos personajes con los que siempre nos podemos sentir identificados en algunas situaciones, todo ello hilado a la perfección en una historia que nunca me deja indiferente.
Con esta nueva novela, ha vuelto a ser así y ha conseguido su propósito, que la novela fuera un regalo para los lectores.
EL AUTOR
ARGUMENTO
«Y llegamos a un lugar que, aún a día de hoy, no sabría muy bien cómo definir.Quizá es ese sitio al que te trasladas cuando suena el timbre del recreo, o allí donde vamos al cerrar los ojos justo antes de soplar las velas, o el viento en el que flotamos al recibir uno de esos abrazos que nos sostienen el cuerpo, las dudas y los miedos...
¿Quién sabe?
O quizá no era más que la parte trasera del armario en el que se había convertido mi vida: ahí donde se almacenan prendas que jamás volverás a ponerte pero que te da pena tirar.»
MIS IMPRESIONES
Cuando le damos la vuelta al libro y leemos la contraportada no vamos a encontrar nada que nos diga de qué trata esta novela, sólo un fragmento de ella y la verdad es que, si ahora mismo tuviera que decir de trata o tuviera que clasificarla en un género creo no sabría hacerlo.Por entrar un poco en situación, la novela comienza contándonos un día en la vida de una persona que se dirige a su trabajo como uno de tantos días. Esa persona podría ser cualquiera de nosotros y para nada puede esperar lo que se le viene encima en ese día. Lo único que diferencia ese día de los anteriores es que estrena un lujoso y carísimo coche que se acaba de comprar, un coche que le durará poco ya que cuando pare a tomar un café en la gasolinera de camino se lo robarán.
Aparentemente, con una llamada a la policía o a nuestra propia familia, llegar a casa o a nuestro destino no debería ser complicado. Sin embargo, nuestro protagonista se verá "encerrado" en un lugar llamado "La Isla" en el que parece que todo el mundo le quiere ayudar pero lo que hacen es irle enredando entre unos y otros, haciéndole visitar los lugares más raros que ha visto en toda su vida y que van impidiendo su salida de "La Isla": El museo de los momentos, un cementerio muy particular, un parque con columpios para adultos, el colegio en el que los niños aprenden finanzas y tienen sus propios negocios...
Además, a lo largo de este recorrido, que en muchas ocasiones se verá forzado a hacer de la mano de el músico, irá conociendo a una serie de personas que irán dejando huella en él. Para mi estas personas no sólo dejan huella en el protagonista, también la dejan en el lector, ya que cada una de ellas nos da una lección o nos deja una frase para la reflexión como tan bien sabe hacer Eloy Moreno: el músico, la mujer de la pastelería y su hijo, la profesora del colegio, el fotógrafo... todos tienen algo importante que enseñarnos.
Esta manera de narrar y de hacer pensar al lector sintiéndote tan identificado con lo que hacen o dicen
los personajes de la historia es algo que me encanta.
En cuanto a la estructura. la novela está dividida en capítulos cortos los cuales se van entremezclando los capítulos en los que se nos habla de la historia principal, la anterior, con la historia del protagonista "x" tiempo antes de llegar a La Isla. Todo para llegar a un final, que si bien te puedes imaginar por donde van a ir los tiros, nunca llegas a saber cómo va a resolver el autor hasta que lo tienes delante y os diré que es un final duro pero maravilloso.
Otra de las cosas que me ha gustado es que el libro es como un círculo. En los capítulos del final volveremos a leer un trozo del principio. No es exactamente que del principio retrocedamos y volvamos atrás para llegar a alcanzar el punto inicial sino que el autor nos hace ver que generación tras generación vamos cometiendo los mismos errores.
Igual que decir de qué trata la novela es muy complicado lo que sí tengo muy claro es que uno de los propósitos de Eloy, como he dicho antes, era hacer pensar al lector en si la vida que llevamos es la que queremos llevar en realidad, en si preferimos vivir en la comodidad de la rutina y la tranquilidad antes que luchar por nuestros sueños y sobre todo una crítica a la sociedad, a la manera de hacer las cosas y de educar de hoy en día, en la que se nos dice qué pensar en vez de enseñarnos a hacerlo y formar una opinión por nosotros mismos.
Lo último que quería decir es que la historia personal de Eloy Moreno, me ha recordado bastante a lo que se habla en el libro en cuanto a perseguir los sueños. Como muchos sabréis, Eloy Moreno se autopublicó su primera novela y eran él y su familia los que la iban vendiendo por los sitios ya que ni las librerías querían distribuirla, fue él mismo quien se hizo su promoción y distribución cuando nadie creía en su novela. Sin embargo, a fuerza de su persistencia y de creer profundamente en el trabajo que había realizado llegó a conseguir su sueño cuando Espasa se fijó en aquella primera novela (El bolígrafo de gel verde) que había entusiasmando a la gente sin estar publicada por ninguna editorial conocida. A partir de ahí todo fue más fácil pero una vez más, los sueños se convirtieron en realidad gracias a no dejarlos escapar y a seguir creyendo en ellos. Si queréis saber la historia con un poco más de profundidad, él mismo la cuenta en su página web.
Sin duda, es una novela que os recomiendo, por la historia, por el fondo y por la manera de narrar que tiene este autor. Os dejo con algunas de las frases que más me han gustado y que te dejan pensando un par de minutos:
"Siempre que voy a tocar a alguna sala, lo primero que hago es darles la enhorabuena a los asistentes, por lo afortunados que son. No por venir a verme a mí, sino porque un miércoles, un lunes, un jueves... entre semana han podido ir a un concierto. Eso es ser rico, colega, lo de tener una casa más o menos cara, un coche grande o una cuenta corriente abultada, eso no es importante si cuando llega el momento en que un colega hace un concierto en tu ciudad, una exposición o presenta un libro no puedes asistir. "
"Colega, a mi hija le importaba una mierda que yo trabajara en un banco, que tuviera más pasta que la mayoría de sus compañeros, que llevara un coche de lujo o que nuestra casa tuviera los muebles más caros del vecindario..., lo único que le importaba a mi hija en ese momento, delante de todos, es que yo sabía tocar la guitarra. Solo eso."
FICHA DEL LIBRO