Los médicos de Cristina Fernández analizarán hoy el resultado de los estudios cardiológicos y, a partir de esos datos, se decidirá la manera en la que volverá a desarrollar su tarea habitual.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner comenzará hoy el camino progresivo para retomar sus actividades después de treinta días de reposo médico. El resultado de los estudios electrocardiográficos determinará de qué forma la Presidenta comenzará a desarrollar sus actividades oficiales. Va a ir de a poco y se presume que en primer término volverá a la actividad desde la Quinta de Olivos y no desde el despacho presidencial de la Casa Rosada.
“Van a evaluar los datos registrados en el Holter y a partir de ahí se verá cómo retoma gradualmente las tareas presidenciales”, confió a Página/12 un funcionario de la Casa de Gobierno. Tras el descanso por prescripción médica, la Presidenta se prepara para asumir lentamente las obligaciones que habían quedado en una impasse luego de la operación para extraer el hematoma subdural que le habían diagnosticado. Ya con el “alta neurológica y neuroquirúrgica”, anunciada anteayer, resta que los equipos médicos evalúen el desempeño cardiológico para determinar los pasos a seguir.
La primera semana de octubre a la Presidenta se le diagnosticó un hematoma en la zona derecha de la cabeza. En principio, por los recurrentes y cada vez más intensos dolores de cabeza, Fernández de Kirchner tomó la decisión, junto con su entorno, de realizarse estudios. Así llegó al hospital de la Fundación Favaloro donde fue atendida por los especialistas del área de neurología. El diagnóstico inicial derivó en la prescripción de reposo por veinte días, pero luego un cosquilleo en el brazo izquierdo de CFK llevó a la decisión médica de internarla y realizar la cirugía.
En el mes que lleva de reposo, la Presidenta se mantuvo dentro de las prescripciones que realizaron los médicos. Mucho reposo, nada de trabajo, no leer diarios ni utilizar las redes sociales, fueron algunas de las sugerencias que Fernández de Kirchner cumplió. Las visitas fueron restringidas a la familia, al igual que la prohibición de viajes, fundamentalmente en avión. A medida que avanzó su recuperación fue retomando algunas de sus costumbres. “Por el carácter de la Presidenta es increíble que haya sido tan buena paciente. Pasaron cosas importantes, como las elecciones legislativas, y sin embargo ella y su entorno mantuvieron a rajatabla las recomendaciones de los médicos”, explicó el funcionario kirchnerista consultado.
Como lo anticiparon en el parte médico emitido el sábado, en el que determinaron el alta, los médicos se reunirán hoy con Fernández de Kirchner para observar los resultados del Holter que llevó durante 48 horas para monitorear su actividad cardiológica y “determinar el ritmo de regreso a las tareas habituales”.