En esta ocasión se aleja unos siglos del periodo histórico al que me tiene acostumbrado, aunque nuevamente ha conseguido que disfrute y que descubra interesantes aportaciones al conocimiento de un pasaje de la historia que siempre se me ha atragantado algo.
Título: El reino del cielo.
Autor: Mario Escobar.
Editorial: Autopublicado.
Año: 2014.
Género: Novela historica.
Páginas: 280 páginas.
ASIN: B00L4QBUQW.
Precio: 2,99 euros.
Sinopsis:
Siglo XI. Madrid es una pequeña ciudad de frontera recién reconquistada a los musulmanes. El rey Alfonso VI quiere que colonos cultiven las tierras vacías y repueblen el reino. Los recién llegados tienen que vivir fuera de la muralla, en los arrabales, sufriendo la amenaza constante de un nuevo ataque morisco. Santiago es un joven campesino leones que junto a su joven esposa viaja, en pleno siglo XI, a la pequeña ciudad fronteriza de Madrid. La ciudad ha pasado a manos cristianos recientemente tras la derrota del reino taifa de Toledo. Tras la llegada a la ciudad Santiago descubrirá que la mayor parte de las tierras son para los nobles y tiene que ponerse a trabajar en la hacienda de Wilfredo, conde de Astorga. La bella mujer de Santiago, Ana, será acosada por uno de los hijos del conde llamado Rodrigo. Al final, Rodrigo consigue violar a Ana y Santiago será condenado a la cárcel por un robo que no ha cometido. Santiago logra escaparse y refugiarse en los arrabales musulmanes, haciéndose pasar por uno de los sarracenos que ha decido quedarse en la ciudad tras la conquista. ¿Qué ocurrirá a Santiago y su familia? ¿Cómo era la dura vida de frontera? ¿Terminarán la muralla antes del ataque musulmán? ¿Lograrán los hombres y mujeres libres vencer la tiranía?.
(sinopsis facilitada por el autor)
Autor:
Impresiones:
No suelo repetir argumento si en la sinopsis queda claro, y con ella basta para satisfacer al curioso sobre la historia que puede encontrarse en el libro. En esta ocasión me veo en la obligación de contaros mi pequeño resumen puesto que creo que la sinopsis no le hace justicia al libro y merece algo más.Corre el año del señor de 1089, estamos en la península ibérica en una época convulsa donde los cristianos tratan de recuperar los territorios ocupados por los árabes. Poco a poco se va logrando, estamos en plena reconquista, que será lenta y tarea arduas, logros que no son permanentes en algunos casos y en otros los ciudadanos se enfrentan en estos territorios fronterizos a la inseguridad militar, política y social de convivir varias religiones en una misma zona.“La tierra de fronteras es tan injusta como de la que procedes” Santiago, nuestro protagonista vive junto a su familia bajo el yugo de un señor que no falta a su cita para recaudar sus impuestos periódicamente, pero en esta ocasión se encontrara con la negativa de Santiago ya que este ha decidido aceptar el llamamiento del Rey Alfonso VI y mudarse desde el reino de León a la ciudad de Magerit (Madrid), una ciudad recién conquistada y que el monarca quiere repoblar con todos aquellos aventureros que se animen en semejante empresa. Para ello otorgara unas cedulas que prometen tierras a los que acudan a la ciudad con el fin de trabajar en la construcción de Madrid, en su repoblación y en el trabajo del campo. El viaje de Santiago, su mujer Ana y su hijo Marcos no será fácil, lleno de peligros por parte de salteadores, animales salvajes e incluso de aquellas personas que parecen amigos. La narración del autor demostrará que el camino es duro, peligroso y nos recordará a esas caravanas del oeste que veíamos en las películas enfrentadas a todo tipo de peligros. Con sus descripciones de las escenas Mario Escobar consigue pintarnos un territorio inhóspito, vacio y peligroso, una España llena de bosques y largas jornadas sin encontrar un alma viajera. Finalmente y podemos decir que por los pelos, Santiago llega a Madrid, allí descubrirá que a pesar de la promesa de tierras del rey, los señores siguen mandando y se quedan con las mejores tierras y en condiciones muy ventajosas. Conocerá a Serafín Magro encargado por Willfredo, Conde de Astorga, de levantar las murallas de la ciudad y ambos entablarán una gran amistad. Conspiraciones políticas, falsas acusaciones y ambiciones harán que ambos personajes huyan de la ciudad tras recaer sobre ellos orden de arresto, teniendo que abandonar hogar y familia, con la esperanza algún día de limpiar sus nombres y volver con los suyos.Podemos decir que El reino de los cielos es una novela histórica con unos personajes ficticios con un trasfondo histórico muy real y en eso la novela tiene un punto de calidad importante pues Mario Escobar como buen historiador que es, nos va explicando un periodo con grandes cambios que supondrán las bases para los grandes acontecimientos históricos que vendrán después. Todo ello a través de las aventuras de sus personajes, sabiendo mezclar magníficamente ficción y realidad, con acción y realidad social. En especial me gusta mucho como encara el autor temas como la nobleza, el vasallaje, la convivencia entre distintas religiones, el honor y la venganza, aspectos muy marcados en la narración y que nos muestran a las claras lo difícil que podía ser vivir en una época como aquella, aunque a la vez, las grandes oportunidades que para los aventureros se abrían continuamente.Una estupenda ocasión para conocer y afianzar nociones sobre historia, ver las disputas entre nobles y monarcas, comprobar cómo la iglesia ha sido una fuente de poder constante en la política de esta tierra y hacernos una idea de cómo se vivía la reconquista desde el punto de vista árabe, una cultura que nos ha donado tanto y que desgraciadamente se le recuerda de manera muy negativa en la memoria.Un aspecto a destacar también de la novela son sus personajes, no encontraremos héroes que se acomoden en nuestra lectura plácidamente, vamos a acompañar a personajes en constante huida, con la mala suerte como compañera y con una vida llena de tragedias constantes por lo que con todo ello, la sensación de tiempos duros se acrecienta pero a la vez, demuestra que ante la adversidad, la historia se construye con la vida de personajes como los que crea el autor. Todo ello de forma ágil, trepidante y sin casi tiempo para respirar porque si me ha sorprendido es la gran cantidad de sucesos que tienen lugar y se cuentan en una novela que si se desarrollara más su trama y lo expuesto por el autor, daría para más de mil páginas.Creo que la novela es muy recomendable a pesar de tener algunos peros como la velocidad que sigue la narración en el ámbito temporal que hace que pierdas la noción del tiempo en algunos momentos y algunos pasajes en los que se acusa en demasía, la brevedad de lo narrado. Mario Escobar presenta un gran trabajo de síntesis histórica que hace las delicias de los amantes de la historia y aporta como novedad un tema tan poco tratado, como la fundación de la ciudad de Madrid y su evolución política en aquellos momentos.