Para muchos puede tratarse de una auténtica aberración, pero no es descabellado pensar en la Poltergeist original como una película con cierto componente destinado a los chavales, porque terror, terror, al fin y al cabo, no es, y aunque hay alguna escena que da cierto malrollo, el film podría considerararse como un híbrido entre las cintas de género de los 80 y, por qué no, una fantasía familiar sobrenatural (la pluma de Spielberg no pasa desapercibida) muy del estilo de Los Gremlins.
Más, tras el salto.
Sam Rockwell (Moon, Guía de Autoestopista Galáctico), coprotagonista del inminente remake que dirige Gil Kenan (Monster House, City of Ember), que aterrizará el 31 de julio en los cines, ha hablado y todos los medios se han llevado las manos a la cabeza tras estas palabras; "El niño de 10 años es el protagonista de la película. JoBeth Williams era la protagonista durante gran parte de la primera y ahora el remake es sobre el punto de vista del niño. Así que se trata más de UNA PELÍCULA DE NIÑOS. No sé si va a ser terrorífica a niveles de calificación R (Restringido a menores de 17 años)", comenta el actor, que continúa explicando que "no va a ser una película del tipo Expediente Warren. Es un filme distinto. Más como una aventura. En el fondo, la película trata sobre el secuestro de un niño. La original también lo es en cierto modo". Yo creo que no le falta razón y eso de que es una "película de aventura de niños" puede interpretarse de diversas formas y no necesariamente tiene por qué ser malo.
La polémica está servida, pero antes de que escupáis a vuestras pantallas, dejad que os recuerde cómo era el tráiler de la peli de Tobe Hooper:
/Vía Collider