El Rey León. “Pumba, que hay ADULTOS delante”

Publicado el 21 diciembre 2011 por Gine @Gine_1414

Hay muchos elementos que condicionan una película y es que para la generación de los 90 y finales de los 80, El Rey León es un símbolo, casi un mito. Así como la muerte de Mufasa un trauma infantil. Yo no soy una excepción. No sé cuantas veces habré visto la película, muchísimas, el VHS gastado que sigo guardando en mi casa a pesar de que no pueda reproducirlo os lo podría decir, yo he perdido la cuenta. Para mí El Rey León es una de esas películas que lo tiene todo, un film redondo y una obra maestra. Esta entrada va a ser mi pequeño homenaje
Cuando me enteré de que Disney había decidido volver a estrenarla en pantalla grande el 21 de Diciembre de 2011 no pude estar más alegre. Incluso podía soportar que lo hicieran en 3D.  El Rey León se estrenó en 1994, yo tenía 3 años, no recuerdo haberla visto en el cine, no sé si lo hice. La primera que tengo conciencia de haberla visto fue 101 Dálmatas; así que esa era mi segunda oportunidad. He entrado a las 18:30 con ganas de retroceder 15 años, y en el momento que ha aparecido el logo de Disney lo he conseguido.
Para el astronauta que acaba de aterrar después de 20 años dando vueltas a la tierra comentar que El Rey León es la historia de Simba un león joven, inquieto y aventurero, sucesor al trono. Tras un accidente planeado por el malvado tío Scar y unas hienas, Mufasa, rey y padre de Simba muere. Éste con sentimientos de culpabilidad huye con el deseo de olvidar. En su huída conocerá a Timón y Pumba una curiosa pareja que le enseñará otra filosofía de vida. Aun así, el destino llamará a su puerta y tendrá que volver a casa para enfrentarse a sus miedos, a su pasado, a su tío Scar y ser el legítimo rey.
El Rey León, como todas las grandes cintas de animación nos plantea un conflicto con muchas capas y de valiente profundidad. Basada en una versión libre de la obra de Shakespeare Hamlet, el film es capaz de transmitir la angustia, el problema de identidad del protagonista sin olvidarse de las escenas divertidas, de acción y de tensión. El Rey León es un producto que convence a los más pequeños como películas de aventuras y a los más mayores mediante una reflexión sobre quien somos y que obligaciones tenemos. Además la película consigue encontrar el punto justo entre elementos dramáticos, cómicos y simpáticos.
Todo eso lo consigue con unos personajes fascinantes, dibujadas con cuatro pinceladas que nos muestran de forma simple pero bastante completa quién es y como es el personaje de carácter, entendiendo sus acciones de forma lógica. Unos personajes que en inglés tienen las voces de Mathiew Broderick como Simba, James Earle Jones como Mufasa, Rowan Atkinson como Zazú, Moira Kelly como Sarabi, Whoopie Goldberg como la hiena Shenzi, Enrie Sabella como Pumba, Nathan Lane como Timon y Jeremy Irons como Scar. Éste último me parece un personaje fascinante y uno de los mejores villanos que ha creado el cine. Oscuro, malvado, pero educado e irónico. Destacar que como todos los productos Disney de los 90 posee un cuidado doblaje con alguna voz inolvidable como a Constantino Romero como Mufasa.
Pero a parte de un guión cuidado, una gran dirección de Rob Minkoff y Roger Allens, y unos personajes que cogen una fuerte personalidad en parte gracias a las voces, El Rey León posee una extraordinaria visión de la sabana africana, así como una gran banda sonora de Hans Zimmer con canciones inolvidables de Elton John y Tim Rice. Hablando de aspectos técnicos, toca hablar del 3D con el que se ha estrenado. El 3D no tiene ni tantas capas, ni tanta profundidad como la historia de El Rey Leon. ¿Es prescindible? Sí. ¿Destroza la película? No. En algunos momentos se ve un buen 3D, el problema es que no se puede hacer un proceso de posproducción y sacar un 3D bueno. En El Rey León el 3D funciona cuando hay 2 planos de profundidad o 3 si no hay ningún elemento que pase de uno a otro; en el momento que un elemento o un personaje pasa de un plano de profundidad a otro se nota que no es una película hecha en 3D. Aun así, momentos como la primera escena, la estampida o algún momento de la lucha final se ven detalles interesantes gracias al 3D.
El Rey León siempre me ha parecido la mejor película de animación. Me parece una película redonda, y ha sido un placer poder disfrutar de ella en el cine. Un placer que mucha gente ya adulta compartirá y mirará con nostalgia de esos años en que lo que te producía la mayor sensación de tristeza era la muerte de Mufasa.
Nota: 10/10