Si, como es habitual, los trailers de las películas no ofrecieran tanta información sobre las mismas, quizás este film hubiera causado más impacto. Y, si no hubiera existido un venerado film como es "El exorcista", hubiera provocado más revuelo aún. De los pocos elementos que salvo de la película; me quedo con la fotografía, donde el marco urbano de la ciudad de Roma y, la inteligencia con la que se utiliza la luz, hacen que el halo de misterio y tensión se mantenga y que no sea tan sosa e inoportuna.
Parece un papel, el de Anthony Hopkins, escrito para él, mientras el guionista veía "El silencio de los corderos", donde este incomensurable actor susurraba con maestría el nombre de Clarice. Os dejo, como siempre, una breve sinopsis:
"Michael Kovak (Colin O'Donoghue) es un decepcionado seminarista norteamericano que decide asistir a un curso de exorcismos en el Vaticano, lo que hará que su fe se tambalee y tenga que enfrentarse a terribles fuerzas demoniacas. En Roma conocerá al Padre Lucas (Hopkins), un sacerdote poco ortodoxo que le enseñará el lado oscuro de la Fe...". (filmaffinity.com)