Strambotic,
el blog más desquiciado de la blogosfera española, describe a Papá Noel como un tipo que no es de fiar. Como alguien que nace en el siglo IV, en Turquía, en una familia adinerada, es nombrado obispo y llega a ser el santo patrón de los marineros. “Va mutando, piano piano, de lo clerical a lo pagano, hasta convertirse en ese afable abuelo rosado y barbudo libertino con cara de borracho irlandés, que acoge en sus rodillas a los niños, en los centros comerciales, se ríe con la O y regala caramelos, golosinas y otras chuminadas dentro de un calcetín.“Santa Claus, Nikolaus, Papá Noel, Viejito Pascuero, Colacho, Pai Nadal o San Nicolás… no importa el nick que le asigna cada cultura. En todos ellos, el recuerdo original, en que ayuda a los más pobres, queda lapidado por el festín capitalista anual. Y he aquí que su oronda figura no pueda soportar la responsabilidad de alimentar los sueños infantiles y, en horario no laboral, se entregue en cuerpo y alma a la bebida y otras lindezas propias de su cargo clerical.“Aquí van algunos ejemplos de cómo se las gasta el heredero legendario de aquel antiguo obispo de Anatolia: