La portada es una foto del claustro mozárabe de San Miguel de Escalada, León.
José Buzzi Gracia hace una reflexión sobre los veinte años de estadísticas que lleva recopilando sobre las pernoctaciones de peregrinos en la ciudad de León, que han pasado de los 3.684 que pararon en el año 1997 a más de 52.000 en los dos últimos años. Y que irán a más pues a los surcoreanos se están sumando los estadounidenses y ya apuntan los chinos con llenar los albergues de la ciudad. Ir pensándolo, que no queda tanto para el próximo año jacobeo.
Yo pretendía reanimar las torturas espantosas de la Santa Inquisición para todas aquellas peregrinas tolondras que van dejando a su paso sus pasteles de sangre menstrual y otros aún más olorosos, llevaba ya media bolsa llena de ellos, joder. Pero el buenón de Félix me convenció de que no. Pues vale.
Fue la última actividad que realizamos con el cacho de pan bendito y bella persona de José Luis, en la foto, el primero a la derecha. Cuántos peregrinos no habrán sido auxiliados durante más de veinte años a su paso por la ciudad de León o en albergues como Samos, incontables.
Nos dejó Jesús Ferreiro Balado, Coronel del Ejército del Aire y Caballero Paracaidista que tanto nos alegraba las excursiones con su gaita y sus muñeiras. Buen Camino, peregrino.
A cuidarse y ser felices; no solo emocionalmente felices, comer mucho yogurt y hacer la dieta de la alcachofa, si no también corazonadamente dichosos.Daniel Paniagua Díez