Desde la Torre Oscura de Mordor, el poder de Sauron se extendió alrededor. Llegó a reunir todos los Grandes Anillos, pero continuaba buscando el Anillo Único que completaría el dominio de Mordor.
El Señor de los Anillos cuenta la gran misión cumplida por Frodo y sus amigos: Gandalf el Mago, Merry, Pippin y Sam, Gimli el Enano, Legolas el Elfo, y un hombre extraño y misterioso llamado Trancos.
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Conozco este libro desde que tengo uso de razón puesto que mi hermano mayor lo tenía pero nunca me animé a leerlo. Y por una parte me alegro de no haberlo cogido de pequeña porque sé que no iba a durar ni 10 páginas. En la adolescencia fui muy poco lectora y seguía dándome respeto el volúmen. Unos años después llegaron las películas y acabé un poco harta de todo el boom. Para aquel entonces conocía a muchas personas que era fans desde pequeñas, leía libros de autores que admiraban a Tolkien y escuchaba grupos de música que, a juzgar sobre todo por sus nombres, eran super fans.
Las películas me gustaron; las he visto varias veces, una de ellas en un maratón non-stop de las extendidas e incluso así no me acababa de animar a leerlo. El año pasado me entró el gusanillo pero se adelantaban otros libros y estuve poco lectora. Hasta que en diciembre dije: ¡BASTA, del 2015 no pasa! Y así fue como un buen día a finales de enero decidí abrirlo. Bueno, para ser sincera lo he leído en el kindle. Lo tengo en formato físico pero ha tenido mucha vida y está muy hecho polvo, no quería destrozarlo más ni descalabrarme los brazos o aguantar posturas incómodas durante horas.
Y vamos ya al tema porque me he enrrollado demasiado contando nada.
Me ha gustado muchísimo, más de lo que creía en un principio. Cierto es que la primera parte de «La Comunidad del Anillo» me pareció algo lenta y meh. Aun así, me ha parecido uno de los mejores principios en una historia.
Me sorprendió la narración, a pesar de tantas descripciones que pueden ralentizar la historia, el vocabulario no es nada enrevesado, es ligero como en «El Hobbit». Por supuesto que en sus más de mil páginas hay partes más lentas, partes que cansan un poco pero por lo general está muy bien llevado el ritmo y la historia.
La mayoría de los personajes se limitan a cumplir su misión y poco o nada llegamos a conocer de su personalidad. Esto, aunque en otros libros me parece un fallo, aquí no me ha parecido mal. Es una historia de «aventuras», no me hace falta empatizar en profundidad con ningún personaje. Eché de menos más descripciones físicas… aunque me dio un poco igual porque mi mente ya está infectada con la apariencia que cada uno tiene en las películas.
Mi parte favorita es cuando aparece Bárbol. Adoro a los Ents. ¡Quiero un Ent! La reunión antes de la marcha y luego la posterior destrucción de Isengard me ha parecido simplemente sublime. Ellos, junto con Tom Bombadill han sido mis personajes favoritos.
Otro punto a favor ha sido el poco romanticismo. Arwen aparece en contadas ocasiones y su historia con Aragorn (bueno, ella en general) no tiene tanto peso para la trama principal como luego inventó Peter Jackson, creando ese protagonismo tan innecesario. Sin saber que era inventado no me gustó en las pelis y ahora menos. Si Jackson quería meter una historia de amor podría haber rodado las escenas entre Eowyn y Faramir.
Y hablando de Eowyn… mi personaje femenino favorito. Vale, tampoco hay mucho donde elegir pero me ha gustado que una de ellas sea una mujer como Eowyn. Una guerrera, una heroína que dice en voz alta que el papel que se espera de la mujer no va con ella. Sus momentos de «ay pobrecita yo, nadie me quiere» y esa tristeza que la invade y te hace querer pegarle, quedan compensados con lo otro. Sí, sin duda.
He disfrutado mucho con esta lectura. No me arrepiento de no haberla leído antes por lo que he dicho al principio de la entrada. Ese gusanillo ha hecho todo más llevadero y la espera ha merecido la pena.
En cuanto a las inevitables comparaciones entre libro y adaptación cinematográfica, poco puedo decir. Bueno, no… hay mucho que decir pero no es plan de pasarme horas despotricando. Aunque me sigan gustando las pelis, a partir de ahora cada vez que vea la cara de Peter Jackson querré pegarle y preguntarle por qué ha hecho algunas cosas de esa manera y por qué no ha metido otras realmente importantes. ¿A su favor? LA ESCENA de Aragorn abriendo las puertas del castillo de Helm, los Nazgûl, Eomer, El Abismo de Helm, los Ents… todas esas cosillas que son una delicia para los sentidos :D
Puntuación: 10/10
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