Aún no nos han llegado ni la mitad de las series basadas en películas que se han anunciado durante los últimos años y ya estamos cansados del recurso. No sólo Bates Motel se ha desvelado como una precuela indigna y demasiado rupturista de Psicosis, sino que la reciente Abierto Hasta el Amanecer nos ha demostrado lo innecesario de revisitar semejantes clásicos. Sólo Hannibal se mantiene como la excepción que confirma la regla, a la espera de que se estrenen ficciones televisivas inspiradas en La Semilla del Mal, El Resplandor, Batman, 12 Monos o Fargo.
Desde hoy, al carro hay que sumar El Show de Truman, el clásico inmortal de Peter Weir, con guión de Andrew Niccol, que nos descubrió el gran actor que se esconde debajo de Jim Carrey en la piel del Truman del título, un hombre que protagoniza el programa de televisión más popular del mundo sin ni siquiera saberlo. El medio The Wrap informa que Paramount TV estaría barajando la idea de una serie limitada, con el final prefijado de antemano, para que la historia no se salga de madre. Es la misma fórmula utilizada por True Detective o precisamente Fargo, que llegará la semana que viene al canal FX.