Sinopsis: Tercera entrega de Las aventuras del capitán Alatriste, El sol de Breda escenifica las batallas y el asedio de la ciudad de Breda en 1625 por los Tercios españoles en Flandes. El joven vasco Íñigo de Balboa es el narrador, como siempre, pero ahora adquiere en este relato un papel más protagonista: es mochilero del tercio viejo de Cartagena, donde sirve de ayudante a su amo el capitán Alatriste, y empuña por primera vez las armas en el combate. Íñigo será, en esta aventura, testigo del sometimiento de la ciudad por las tropas españolas, y describirá años más tarde al pintor Diego Velázquez, para que los inmortalice en un famoso cuadro, los rostros de los participantes en la batalla: el general Ambrosio Spínola, un respetado guerrero con dotes de político, que abortará el conato de un motín de las tropas, hartas de pelear sin que vean recompensados sus esfuerzos con una paga que nunca llega, y que el general les adelantará de sus acaudaladas arcas o el maestre de campo Pedro de la Daga, despreciativo con sus tropas hasta la crueldad, o el dubitativo capitán Carmelo Bragado y el valiente soldado Sebastián Copons, veteranos todos de las pasadas guerras en Nápoles y camaradas del capitán Alatriste.
Opinión:1625. Breda. Flandes, región de la actual Bélgica. Hasta allí nos lleva el señor Pérez-Reverte en esta increíble aventura.
El narrador, una vez más, es Íñigo, pero ahora ya no es un mero espectador de las aventuras del Capitán, sino que ahora cuanta también sus propias aventuras separado de su amo, ya que Íñigo ahora es un mochilero alistado en los temibles Tercios españoles, la mejor infantería europea durante siglo y medio. Era escuchar el nombre de Tercios, y los contrarios saber que se enfrentaban a un ejercito que seguía siempre adelante, no se amedrentaba nunca, agresivos, y disciplinados como no se había visto en Europa, no rompían filas ni aún cuando iban en inferioridad y estaban siendo masacrados. Eran el ejército más temido.
Pérez-Reverte nos adentra en el mundo de los soldados españoles, aquellos que consideraban el honor por encima de todas las cosas, que preferían recibir un castigo con la espada (lo que suponía la muerte) antes que les tocasen con la mano o un palo. Leyendo este libro, nosotros también cogeremos mochila, arcabuz y espada, y nos iremos hasta Breda a pelear en trincheras, a asistir a sublevaciones, a encuentros con el "arte", a hacernos auténticos soldados, sentiremos la emoción de ver un botín y la desesperación de que no nos den nuestra paga, tendremos que estar siempre alerta para sobrevivir cada día, cada hora, cada minuto ...
Ya es conocida la exquisita descripción de este autor, pero en El sol de Breda se luce. Parece tan real todo, que si tienes un poco de imaginación puedes sentir hasta tu cuerpo sucio de la tierra, el olor a pólvora y a sangre, los ecos de los disparos y las campanas de las ciudades sonando.Entendemos como se regían los Tercios, como se elegían a los Maestres de Campo y Capitanes, entenderemos su forma de pensar en cuanto al honor, estrategias militares, visitaremos Flandes; conoceremos a gente tan importante como el gran Ambrosio Espínola, conocido por ser uno de los últimos grandes jefes militares españoles del Siglo del Oro español tomando Breda, que será inmortalizado por Velázquez en el impresionante cuadro La rendición de Breda (el que va a recibir la llave es Espínola).
Aquí habrá como dos historias: una, la que cuanta Íñigo estándo el Capitán con él, y otra que es lo que le pasa Alatriste. Seguiremos con el mismo lenguaje que en anteriores libros, pero está vez con términos bélicos en vez de líricos o de poesía.Entraremos en un huracán de acciones, de batallas, de acción sin parar ... Todo acompañado con lecciones sobre honor y moral, que muy bien vendrían a la gente de hoy en día.
Ni por asomo es un libro pesado ni aburrido; tiene partes en las cuales son todo explicaciones de lugares o de tácticas, otras partes son de batallas, otras son aventuras, encuentros y situaciones que se dan cuando asaltas una cuidad ... Pero siempre van acompañadas de un giro de acontecimientos ... Lo que hace que el libro sea totalmente dinámico e imprevisible.
No voy a decir nada más, porque es una auténtica genialidad de libro. Tenéis que leerlos por vosotros mismo. Ya me diréis si estáis de acuerdo conmigo o no, pero Pérez-Reverte, para mí, escribió una obra simplemente perfecta.
Nota:Para más información sobre el cuadro La rendición de Breda (Las Lanzas), os dejo el link de un blog que sigo y que hace un estudio de este cuadro. La verdad que es una maravilla de estudio. Merece la pena leerlo. Os lo garantizo.España Eterna. La rendición de Breda (las Lanzas) la obra de un genio