Hoy 21 de junio es el solsticio de verano, en el Hemisferio Norte. Según los expertos, “El solsticio de verano celebra la unión entre la energía masculina y la femenina y es el momento más luminoso del año. El día más largo y la noche más corta: “la luz tiene más energía que la oscuridad.”
Como seguramente ya sabes por lo que escribo aquí, soy hombre de pocos rituales y dogmas. No necesito encontrar razones para explicar lo que siento por dentro! Además, “doctores tiene la iglesia para ello“. Y la verdad es que esta especial fecha se celebra desde siempre y en casi todas las culturas, de una forma u otra! A mí me basta y me sobra en concentrarme y, sobre todo, aprender a experimentar y vivir lo que me dicta mi Alma, lo que no siempre es fácil ni cómodo, como seguramente sabes! Vivir cada día en un mundo sin Alma no me es posible y convivir con desalmados no es siempre confortable! Este es quizás el necesario cambio y reto personal de este mundo loco nuestro…
Un día como hoy -y seguramente cada día ya, en mi nueva vida- me sugiere celebrar la energía -en forma de luz y calor-, la unidad de todos -o sea, el amor- y la gratitud por estar vivos y por todo lo que nos rodea! En muy obvio que el Sol es un buen símbolo de todos ellos! Sin Sol no hay vida posible, como sabes y, sin vida, no hay ni puede haber amor ni gratitud! Pero, tan solo te recuerdo que, tras todo ello -o mejor, antes- está el perdón, que trae la paz a nuestra vida! Si uno perdona no ser consciente en todo momento del verdadero amor, de la vida, de la energía del Universo y no muestra agradecimiento cada día por ello, solo debe perdonarse ser humano y, como tal imperfecto, aunque en contínuo crecimiento!
Luego tras el perdón, surgirá el amor que nos une unos con otros y con lo que nos rodea y la gratitud por estar vivos y poder hacerlo! Luego, yo, huyendo de las escenas grandilocuentes y los acontecimientos épicos, busco la paz, la armonía, el amor y la gratitud en los detalles cotidianos y sencillos de mi día a día! Y los encuentro -quizás no siempre tan tangibles ni cercanos, como desearía- y los vivo desde mi interior, frente a una mirada de amor cómplice, durante un silencio compartido o en la mera contemplación de la Naturaleza que nos rodea y, a la vez, nos enseña sobre la vida!
Recuerda que a los gatos nos gusta más la mágia de la noche, la energía del sol reflejada en una magestuosa luna o compartir todo ello en el silencio cómplice, con quien amamos! Y no es porque temamos el sol o la intensidad de sus maravillosos efectos y colores, sino porque admiramos y valoramos más la sutileza de los detalles y los amores intensos, pero no espectaculares ni ruidosos. Lo mejor que tenemos no lo exponemos siempre -salvo honrosas exepciones y solo a quienes lo merecen- y no siempre durante el día, a plena luz, sino en la soledad y el silencio compartidos durante la mágica y misteriosa noche!
Aún así, adoramos el Sol y todo lo que éste nos aporta a nuestra vida! Por fuera, el color, la intensidad, la explosión de sus efectos, la vibración de la vida intensa, sintiéndonos bien vivos! Pero, en nuestro interior, adoramos la paz que nos provoca, la armonía y el amor que sentimos! Y por todo ello estamos igualmente agradecidos, tal vez porque no distinguimos si la magia del amor y de la vida la compartimos durante el día o la noche, en una puesta de sol o al alba, pero sí para siempre y, si es posible, también en silencio!
Te deseo un feliz Solsticio de Verano, hoy 21 de junio! Encuentra en él esa luz, ese amor y esa gratitud para celebrar la vida, con todos y en armonía!
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