Acompáñame a leer esta triste, aunque al final curiosa y hasta un poco humorística, historia.
Verás, en internet como en el mundo real, hay servicios al cliente excepcionales y otros pues, no tanto.
Uno de los mejores que hay en el mundo digital es sin duda Netflix, las ocasiones que he tenido que contactar a soporte notas que obtienes la atención en segundos, la solución completa en minutos. El servicio al cliente es excelente.
Lo que estás a punto de leer es justo el caso contrario, el soporte de Uber que luce desarticulado, sin solución y con muchas dudas en el camino.
El contexto
Para poder entenderlo mejor te contaré el contexto concreto.
Resulta que en la ciudad donde vivo, ocasionalmente he tenido que usar los servicios transporte como Uber o Didi.
En Didi tengo una cuenta a mi nombre, en Uber no había sido necesario tener una a mi nombre. Hace unas semanas decidí obtener mi cuenta personal.
Descargué la aplicación, introduje correo electrónico, teléfono y al dar la opción de alta me lanzaba un mensaje de error. Pensé que era una saturación del servidor o alguna otra situación por lo que decidí pasarlo por alto durante unos días.
Un tiempo después lo volví a intentar y nuevamente el mensaje de error. Ya no podía ser una simple coincidencia así que contacté a soporte a través del correo electrónico.
Enseguida adjuntaré las capturas de la conversación junto con mis comentarios para explicar cada una.
Los mensajes
El primer intercambio de mensajes fue amable:
Nunca me había dado de alta antes con mi número telefónico ni con mi correo electrónico personales, aún así estaba dispuesto a poner todo de mi parte así que respondí:
Comienza el segundo intercambio de mensajes, se empieza a poner raro aunque ya hay propuesta de soluciones:
¿Habré creado una cuenta de conductor por error? No lo creo. Pero sigo poniendo de mi parte:
Las respuestas se vuelven más complejas y difíciles de realizar:
La razón de contactar a soporte es que no podía entrar en mi cuenta recién creada, en este punto vale recalcar que cada correo viene firmado por un asesor distinto cada vez.
En este punto es casi obvio que alguien ha utilizado mi correo para darse de alta como conductor, aunque Uber debería haberlo verificado ¿o no?
La siguiente respuesta se pone interesante:
Me entero que ya le debo a Uber, antes siquiera de haber utilizado la aplicación, pero ojo a los detalles:
- El importe lo adeuda un conductor, yo jamás he sido conductor, ni pasajero desde una cuenta propia.
- El importe se encuentra en CLP o pesos chilenos. Valga aclarar que radico actualmente en México, no conozco Chile y tampoco manejo su moneda.
Lo dicho, Uber tiene mi correo personal en su plataforma ¿verificado manualmente? No lo creo.
Vaya, un día eres una persona normal y al otro te enteras que ya le debes a Uber
Pero entonces…
A ojos de Uber ya no solo debo, ya tengo también un socio.
Y por privacidad no me pueden dar el nombre de quién ha usado mi correo. Un vaivén de emociones.
Esos “datos” a los que se refieren es únicamente el correo electrónico, en su base de datos es imposible que haya una verificación desde mi cuenta o que coincida algún otro dato, pero no se puede contrastar porqué es “privacidad” ¿recuerdas?
Uno de mis últimos intentos por arreglar algo:
Y después de todo el trabajo logrado, regresamos a donde estábamos:
¿Valdrá la pena volver a explicar que nunca he sido conductor? ¿Porqué no?
La conclusión
Y sí, todo esto antes de usar la app a mi nombre.
Está de más decir las ganas insaciables que tengo de utilizar el servicio
¿Tengo opciones? Claro, utilizar otro correo electrónico es una de ellas.
La cuestión es, mañana alguien podría utilizar tu correo electrónico personal, que por lo visto no tienes que estar verificado, ser conductor o pasajero, lo que le resulte más conveniente y quedar a deber sólo para que cuando te des de alta te cobren a ti.
¿Has tenido alguna experiencia similar?
No dudes en compartirla.
La entrada El soporte de Uber sí sirve… para hacerte reír se publicó primero en Cristian Monroy.