El suculento “botín” de González

Publicado el 12 noviembre 2017 por Felipe @azulmanchego

Foto: EFE

LA HISTORIA QUE sigue parece más bien el guion de una serie televisiva. 4,64 millones de euros en cuentas bancarias de Colombia, ahora bloqueadas, y bienes inmuebles aún sin tasar a nombre de testaferros. 

Este es el supuesto “botín” que Ignacio Gonzálezescondía en Sudamérica fruto de sus operaciones presuntamente irregulares a través la empresa pública Canal de Isabel II, que él mismo presidió en tiempos de Esperanza Aguirre.

La intervención de estos bienes, según avanzó la Cadena SER, ha sido determinante para la puesta en libertad provisional del expresidente madrileño al disminuir el riesgo de fuga y el de destrucción de pruebas. Así lo ordenó el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón después de que su familia hiciera efectiva la fianza de 400.000 euros que se le impuso para su excarcelación.

De esta forma, los investigadores del caso Lezo dan prácticamente por cerrada la causa tras la incautación del dinero y de los bienes inmuebles que González pudo haber ocultado en el país caribeño. A todo esto hay que sumar otros 900.000 euros en Suiza en concepto de “mordida” -según dijo su principal testaferro- por una operación fraudulenta.Estos serían, de forma sucinta, los hechos, que el abogado de González, Esteban Mestre, niega de forma categórica.  "Ignacio González no tiene ningún testaferro, ni sociedades, ni cuentas bancarias, ni dinero, ni bienes inmuebles en el extranjero, ni personalmente ni a través de la titularidad fiduciaria de terceros", asegura el letrado defensor.De confirmarse plenamente todos  los extremos que el abogado rechaza, estaríamos ante una de las utilizaciones más impúdicas realizadas nunca por parte de un servidor público. En 2008, cuando era ‘número dos’ de Aguirre en el Gobierno regional y presidente del Canal de Isabel II, González fue captado en un vídeo durante un viaje a la ciudad colombiana de Cartagena de Indias acompañado de otras personas que portaban unas misteriosas bolsas de gran tamaño. "Una toalla, una gorra y bolígrafos”, dijo un año después en una declaración notarial Edmundo Rodríguez, el hombre fuerte de González en América Latina.Paradojas de la vida, en Colombia comenzó todo con el vídeo de marras y las famosas bolsas;  en Colombia concluye, según los investigadores, el grueso de la operación Lezo. González necesitará Dios y ayuda para convencer al juez, a su familia, a sus antiguos colaboradores, a las personas que confiaron en él, a los militantes del PP, a quienes le votaron y a la opinión pública en general de que no es un vulgar delincuente.

Crudo lo tiene para persuadirnos, si es que aún está en condiciones de poder hacerlo, de que es completamente a ajeno a la corrupción que, de momento, le ha mantenido entre rejas durante medio año. La cristalinas aguas del Canal bajaban entonces más turbias de lo que nadie pudo imaginar.