El sudor inglés o sweating sickness

El sudor inglés es una enfermedad muy contagiosa y mortal que comenzó en tierras inglesas durante el reinado de Enrique VII y que desapareció misteriosamente en 1578.

En 1485, después de la Batalla de Bosworth, se dice que la guerra de las Dos Rosas terminó, aunque la última batalla librada fue la de Stoke Field dos años más tarde.

Como decíamos, acabó la Batalla de Bosworth en agosto de ese año y Enrique VII fue coronado en septiembre como rey de Inglaterra, dando comienzo al reinado de 118 años de la dinastía Tudor.

El Sudor empezó en 1485 a bordo de los barcos que se dirigían a Inglaterra con las tropas del Duque de Richmond, que regresaban de la guerra.

Pronto la enfermedad se extendió por toda la flota, y los que se pudieron salvar de la enfermedad en los barcos llegaron para ver morir a muchos de sus amigos y familiares.

La plaga había viajado había llegado a pueblos y ciudades. Parece ser que el primero que tuvo que luchar contra ella, desde el inicio, fue el médico Thomas le Forestier.

Tan solo algunos días después de la victoria, en septiembre, una extraña enfermedad aquejaba a los sobrevivientes de la batalla que habían acompañado al rey hasta Londres.

Enrique VII estaba proscrito, se le había despojado de su herencia y estaba bajo muerte civil cuando tomó el trono en 1485. Su coronación anuló la muerte civil.

A continuación, el parlamento declaró que cualquiera que se opuso a Enrique en Bosworth era un traidor.

Los primeros en sudar y morir en Londres fueron el Lord Mayor y sus concejales. Pero hubo ciudades que perdieron un tercio de la población, pero ciudades inglesas. En Escocia no hubo enfermedad del Sudor ni en Irlanda, ni en el continente europeo tampoco.

Los síntomas eran mareos, escozor de la piel, dolor de cabeza, cuello, hombros y extremidades. Todo ello, en un plazo muy corto de unas 3 horas.

A continuación, se presentaban el agotamiento, somnolencia y convulsiones, aparte de frecuentes hemorragias nasales. Así, la mayoría de los pacientes moría en un plazo demasiado corto.

Se contagiaba rápidamente, y se transmitía a los individuos sanos, que se levantaban por la mañana bien y por la noche estaban muy enfermos.

Muchos creyeron que se trataba de la Peste Negra, pero no se oscurecían las venas ni los humores, tampoco aparecían bubas bajo la piel, ni siquiera las manchas púrpuras o síntomas semejantes a la Peste.

Los médicos observaron que los enfermos padecían de un sudor intenso, que una vez que comenzaba, lo mas común era que fallecieran.

Generalmente los gérmenes de las enfermedades atacaban a la gente agotada por el trabajo y mal alimentada de los barrios bajos, pero esta enfermedad era bastante más exigente y lo hacia en las clases alta y media. Los que la padecían, eran casi siempre hombres, nunca atacó ni a niños ni a bebés, algo parecido a la llamada “Gripe Española” de 1918.

Tantas personas fallecieron por culpa de esta enfermedad, que los muertos estaban comenzando a llenar las calles. No había sitio suficiente en los camposantos.

Estas observaciones fueron referidas por Francis Bacon en el primer brote, ya que hubo algunos mas en Inglaterra: 1506, 1517, 1528, 1551 y 1578.

Arturo Tudor y Catalina de Aragón

Arturo era el primogénito del primer rey de la dinastía Tudor, Enrique VII, y de su esposa Isabel de York. Su nacimiento en 1486 suponía la unión entre las casas de York y Lancaster que habían estado enfrentadas durante treinta años en la sangrienta guerra de las Rosas.

Cinco años después nacía el hermano menor de Arturo, que fue bautizado con el nombre de su padre, Enrique.

Catalina de Aragón, la hija pequeña de los Reyes Católicos, a los cuatro años fue prometida en matrimonio con el Príncipe de Gales, Arturo, primogénito de Enrique VII de Inglaterra, por medio del Tratado de Medina del Campo.

El 14 de noviembre de 1501, Catalina se desposó con Arturo en la catedral de San Pablo de Londres, pero el matrimonio duró tan solo un año.

La pareja se instaló en el castillo de Ludlow, cerca de la frontera con Gales. Los dos enfermaron posiblemente de sudor inglés aunque solo él falleció el día 2 de abril de 1502, a los 15 años. Arturo Tudor está enterrado en la catedral de Worcester.

En los siguientes años, la situación de la Catalina fue muy difícil, ya que no tenía con que mantener su pequeño séquito. No podían dejarla volver a España porque habrían de devolver la dote, que ya no tenían.

El papel de Catalina en Inglaterra quedó reducido al de viuda y diplomática al servicio de la Monarquía hispánica, aunque mas adelante se casó con el hermano de su difunto marido Arturo, el que mas tarde seria el rey Enrique VIII.

Contrajeron nupcias en 1509, enrique y Catalina, durante una ceremonia privada en la Iglesia de Greenwich. «La Reina de todas las reinas y modelo de majestad femenina», según la describiría un siglo después William Shakespeare.

Fue una de las soberanas más queridas por el pueblo inglés en la Historia.

Enrique VIII y Ana Bolena

Tras algunos embarazos fallidos de Catalina y de darle solo una hija y no herederos varones, se encapricha Enrique VIII de Ana Bolena, entre otras.

Pero Ana le rechaza y comienza así un tira y afloja, hasta que el rey decide anular el matrimonio con Catalina para casarse con Ana.

El Papa rechaza esta propuesta y el se convierte a otra nueva religión. La Iglesia Anglicana y se “divorcia” de Catalina y se casa con Ana Bolena.

En el año 1528 la enfermedad del sudor ingles ataca a Ana Bolena, y el rey abandona la corte y se encierra en uno otro castillo ya que le tenia pavor a las enfermedades. En Roma lo ven como un castigo de Dios por separarse de la iglesia.

Ana milagrosamente se recupera de la enfermedad. Ya habían perdido las esperanzas después de que los medicos visitaran a Ana para tratar de curarla, y le dijeran a su padre que debía llevar un cura para darle la Extrema Unción ya que creían que ella no pasaría de ese día.

Debido a esta enfermedad todo el mundo se entero de la relación entre el rey y la dama de honor, lo que llevó a este a pedir la anulación del matrimonio con su anterior esposa Catalina.

María Bolena

Al morir el marido de María, hermana de Ana Bolena durante un “brote de sudores” , ésta le cede el cuidado de su hijo, el joven Henry Carey. Era costumbre entre la aristocracia inglesa poner a los hijos de uno al cuidado de familiares más ricos.

Su marido le había dejado al morir un número considerable de deudas que sólo su hermana podía sufragar. Ana consiguió que el hijo de María fuera educado en un respetable monasterio cisterciense.

Se cree que pudo haber sido hijo bastardo de Enrique VIII, Ya que María Bolena fue amante del rey. También fue amante se cuenta de Francisco I de Francia con anterioridad.

En 1528 los gérmenes de la Enfermedad del Sudor invadieron el continente europeo, saltó Francia y afectó a los alemanes, cuatro semanas. Y desde allí se extendió a Suecia, Suiza, Dinamarca y Noruega, Lituania, Polonia y Rusia, Bélgica y Países Bajos.

Antes de finalizar el año había desaparecido, excepto en el este de Suiza, donde permaneció hasta el año siguiente.

Llego a Austria y sitió a los sitiadores de Viena, los turcos, pero no atacó a los austriacos. Se levantó el cerco y los turcos huyeron aterrorizados, los austriacos capturaron prisioneros, saquearon las tiendas abandonadas por los turcos, llenas de muertos y moribundos.

Entre 1718 y 1861, la enfermedad que se llamó «Picardy sweat», ya que se originó en esta región de Francia, se extendió por Italia y Alemania. Se parecía al «sudor inglés», aunque duraba un período de una a dos semanas y era menos mortal e iba acompañada de una erupción cutánea.