Se le considera, tradicionalmente, un té claro, y figura entre los tés chinos con mayor fama mundial. Su nombre significa “té del dragón oscuro”, y huele a flores, además de prevenir la obesidad, tomado regularmente. ¿No está mal, no?
Está a medio camino entre el té negro y el té verde, sus primos hermanos. Pero al té oolong azul se le conoce como té parcialmente fermentado, si bien otros lo consideran “té posfermentado”, puesto que habría sufrido un proceso de maduración posterior. Aunque no es tan conocido como otras clases de té, va ganando popularidad poco a poco para muchos.
Más allá de saber dónde comprar té oolong (乌龙, en mandarín: pronúnciese Wū lóng), quizás debamos conocer a fondo los beneficios que conlleva tomar este té, cuya suavidad, según los expertos, hace de él una bebida muy agradable.
Una taza de té Oolong puede cambiar el día a cualquier persona. Su delicioso aroma, que oscila entre floral y amaderado, es un verdadero placer, tanto al olfato como a las papilas gustativas. Generalmente, el té Oolong es consumido por sus propiedades para perder peso, sin embargo, esta infusión puede aportar muchos más beneficios.
El té Oolong también es conocido como té azul, aunque no es precisamente azul, pues, su verdadera tonalidad varía de acuerdo al proceso de oxidación al cual es sometido. El color del té Oolong puede ir desde el amarillo hasta el verde, precisamente porque la finalidad de su proceso oxidativo es que este sea más fuerte que el té verde, pero menos intenso que el té negro.
Su extracción, al igual que otros tés, parten del árbol Camelia Sinensis. Su secreto se esconde en el grado de oxidación al cual se somete, ya que este puede partir de un 8% y alcanzar un 85%. Cuando se encuentra más próximo al 8%, entonces podría decirse que guarda un aroma y un sabor más similar al té verde, es decir, una combinación de miel con notas de flor.
Si el grado de oxidación es más elevado, pero no excede el 85%, entonces tendrá un aroma y un sabor más parecido al té negro, a saber, una mezcla de nueces y madera. La oxidación de este peculiar té se hace colocando las hojas bajo el sol intenso. Luego, siguen las etapas que llevan el resto de los tés, cuidando siempre la temperatura.
El consumo del té oolong ha llegado a Occidente gracias a los emigrantes que trajeron su delicioso sabor desde China, su país originario. La concentración de polifenoles se asemeja a la de catequinas del té verde.
Propiedades y beneficios del Té oolong
El hecho de que disminuya la grasa corporal y ayude a adelgazar -debido a que mejora el metabolismo de los lípidos- hace de esta bebida una aliada apreciada si se está a dieta. O simplemente, si se quiere evitar la obesidad. Sus efectos diuréticos son muy valiosos, puesto que ayudan a perder líquido. Los aminoácidos afectan, positivamente, al pelo y las uñas.
Pero hay más. Sus poderes antioxidantes, vitaminas y minerales son excelentes para nuestras defensas, y reducen la tensión arterial y el colesterol, previniendo enfermedades como el cáncer. De hecho, nuestros pulmones, en especial si somos fumadores, agradecerán mucho la ingesta de este té. Sus efectos diuréticos son muy valiosos, puesto que ayudan a perder líquido.
El té Oolong, tal como se ha mencionado, tiene múltiples propiedades, aunque comúnmente es consumido por su capacidad para adelgazar, la cual se debe a la presencia de cafeína que este contiene, tal como sugieren los estudios sobre la acción contra la obesidad del té Oolong.
Sin embargo, además de esta significativa propiedad, también se pueden mencionar:
- Mejora el sistema inmunitario
- Poder antioxidante
- Actúa como preventivo contra el cáncer
- Disminuye la presión arterial, dependiendo del grado de oxidación
- Reduce los niveles de glucosa en la sangre
- Beneficia la función respiratoria
- Mejora los niveles de colesterol
- Rejuvenece la piel
- Combate la grasa
- Contribuye a disminuir los efectos producidos por el consumo de las bebidas alcohólicas
Tal como se deduce, los beneficios del té Oolong son diversos. En China este té es conocido también como qing cha, ya que qing denota el color puro de la naturaleza –que también se puede traducir como verde o azul-, y cha, que quiere decir té.
Contraindicaciones del té Oolong
Como cualquier otro té, se debe tener especial cuidado si la persona está embarazada, en período de lactancia, o si tiene problemas con el consumo de cafeína. Del resto, puede ser ingerido con normalidad.
¿Cómo se debe tomar el té azul… y cuándo?
Un té tiene sus momentos. Si seguimos la tradición oriental -según divulgadores como Miguel R. Heredia-, habría que tomarlo a media mañana, o un poco antes (o una hora después) de las comidas, con el fin de que no afecte al estómago.
En el caso del té oolong, se dice también que lo suyo es tomarlo justo después de comer. ¿Y cómo tomarlo? En primer lugar, evitémoslo antes de dormir. Aunque el té azul (entre 10 y 55 mg.) no acumule tanta teína como el té negro (entre 25 y 100 mg.).
Hay quien prefiere acompañar sus comidas con él. Marida bien con los pescados, también con las aves, el pique y los alimentos salados. Tanto el té verde como el oolong están considerados suaves, de modo que se aconseja prepararlos en teteras de porcelana, cerámica o vidrio.
Coloquemos el té en hebras en un colador -una cucharadita-, y a continuación añadamos el agua hirviendo a unos 90 o 100º C, dejándolo en reposo, alrededor de tres minutos. Se oxida rápido, de modo que… ¡cuidado con alargar el reposo!
Un par de tazas al día, cada día, sienta muy bien; si bien lo mejor es no endulzarlo, en caso de que necesitemos algo de azúcar, mejor recurrir a la miel o a la estevia, edulcorante de origen sudamericano.