Me uno por primera vez a la iniciativa Blogger Traveller este mes dedicada a un lugar con historia de mi ciudad, Madrid. He elegido un lugar que tiene mas historia que la propia ciudad, el Templo de Devod.
Madrid aparece en el siglo XI a raíz del establecimiento de una fortaleza por parte del emir Mohamed I en el lugar que hoy ocupa el Palacio Real. Sin embargo, no voy a hablar de un lugar con XI siglos de historia, ni del Palacio Real de Madrid, que desde luego tiene mucha historia, sino que he elegido un sitio con el doble, XXII siglos de antigüedad, el Templo de Devod.
En el año 1968 Egipto regaló a España un auténtico templo Egipcio. ¿Por que?. Tenían previsto construir una gran presa en el Nilo para regular sus crecidas, la presa de Asuán, pero la presa daría lugar a un gran lago, el actual lago Nasser, que inundaría muchos de los templos existentes a orillas del Nilo en la zona de Nubia. Se lanzó un llamamiento internacional por la UNESCO para salvar estos templos, sobre todo el de Abu Simbe l y España acudió. Se consiguió salvar Abu Simbel y muchos otros templos, pero algunos quedaron bajo las aguas para siempre y cuatro fueron regalados a los países colaboradores y trasladados piedra a piedra. Son los templos de Dendur en Nueva York, Ellesiya en Turín, Taffa en Leiden y Debod Madrid.
Como llegar
El Templo de Devob no es una visita habitual en el top ten de las que se incluyen en una estancia corta en Madrid, sin embargo creo que merece mucho la pena. Está situado muy cerca del centro, al lado de la Plaza de España y se puede ir andando en un cómodo paseo desde la Puerta del Sol o el Palacio Real
El Templo de Devob
El Templo de Debod se encontraba originalmente en la baja Nubia, en una pequeña localidad con ese nombre a orillas del río Nilo muy cerca de la primera catarata y del lugar donde el Nilo corta al Trópico de Cáncer. Estaba situado cerca de la isla de Filé donde se situaba el santuario de la Diosa Isis. El Templo de Debod formaba parte de ese santuario, pero su culto estaba dedicado al Dios Amón de Debod.
Aunque se trata de un pequeño templo para aquella gran civilización que fue la de Egipto, se trata de un gran regalo para la ciudad de Madrid. Es de señalar lo atractivo del conjunto conseguido con la localización elegida para situar el templo, con el estanque que hay situado ante el y en el que parece que se bañan los arcos. La iluminación nocturna termina de convertir el lugar en un sitio mágico.
En el interior se pueden observar inscripciones del tipo bajorelieve, algunas de ellas en muy buen estado. Además, está muy cuidada la documentación explicativa de cada una de las escenas representadas, con imágenes y texto para ayudar a interpretarlas.
A las inscripciones iniciales se han añadido muchas en tiempos posteriores. Al fondo de la planta baja y sobrepasadas todas las inscripciones hay una cámara con la naos de Ptolomeo XII.
En la parta alta del templo, subiendo un piso, hay una maqueta que muestra el tamaño relativo de los diversos templos que se distribuían a lo largo del Nilo en Nubia. Como he mencionado, Debod era solo un pequeño regalo, otros similares quedaron bajo las aguas, pero se logró el objetivo, salvar el gran Abu simbel. También es posible salir a la "azotea".
Iniciativa Blogger Traveller
Dentro de la iniciativa Blogger Traveller muchos blogueros nos ponemos de acuerdo cada mes parar publicar al mismo tiempo artículos sobre nuestras ciudades inspirados en un mismo tema o palabra. Este mes, el tema era "Lugar con Historia". Puedes visitar muchos mas lugares "con historia" en Blogger Traveller Noviembre
Otra información de interés
Recomiendo visitar el Templo de Debod al atardecer, para poder verlo con luz de día pero terminar disfrutado de su iluminación nocturna. De noche el templo es un pequeño espectáculo que me hizo recordar alguno de esos sueños viajeros cumplidos, Egipto, que curiosamente visité sin saber que tenía un pedacito en mi propia ciudad.
Por cierto,
Si viajas a Madrid y si te animas a visitar el Templo de Debod, te invito a volver a este blog de viajes para contarnos tus impresiones.