Género. Ensayo.
Lo que nos cuenta. Con el subtítulo Con el ejército soviético de Stalingrado a Berlín y con un breve repaso previo de lo que sucedió desde la invasión alemana de la URSS hasta la lucha callejera en la ciudad a orillas del Volga, acercamiento a la experiencia de los militares soviéticos y del desarrollo de las hostilidades en el Frente Oriental para que la URSS se haga con la iniciativa estratégica en la Segunda Guerra Mundial (Kursk) y el posterior avance de sus tropas hacia el oeste en distintas operaciones de envergadura hasta la caída de Berlín.
Mi opinión. Trabajo que mezcla la historia estratégica del conflicto en el Ostfront a partir de 1943 (el desarrollo de estrategias complejas por parte de los soviéticos, la permeabilidad de Stalin para escuchar las ideas de sus jefes militares, la profesionalización y experiencia en combate de los soldados que, además, cada vez tenían más y mejor equipo) con las experiencias individuales de los participantes en el campo de batalla y/o con civiles en las zonas de guerras, muy insistente en la actitud criminal y hostil de un buen número de militares soviéticos pero ofreciendo posibles explicaciones y no excusas (en realidad no hay nada que explicar porque, insisto, la guerra es brutalidad), buen ritmo, escrito pensando en una gran variedad de lectores, interesante y entretenido aunque no especialmente novedoso en conjunto, con un gran epílogo por lo que cuenta, tremendo en varios aspectos, y por las muchas cosas que simboliza simultáneamente.
Destacado. El episodio de la tomadel gran complejo Auschwitz-Birkenau (si, toma, no liberación) y lo que hubo detrás, pero también el epílogo, en concreto sus cuatro últimos párrafos.
Potenciales Evocados. Algo de la propuesta de “La guerra no tiene rostro de mujer” pero sin su sensibilidad, estrictamente bélico (desde lo operacional mayoritariamente) y cronológico (no temático); más brioso que otros trabajos del autor.