El UDC lanza su campaña para salvar el oro de Suiza

Publicado el 13 noviembre 2014 por Lingoro

Campaña del UDC

El papel se desintegra, el oro se mantiene.  Es con esta imagen que el UDC ha lanzado su campaña en favor de la iniciativa popular para salvar las reservas de oro del Banco nacional BNS.  Según el partido, el banco central debe conservar suficiente metal amarillo ya que los altos riesgos ligados al papel moneda son cada vez mayores.

La iniciativa “Sauvez l’or de la Suisse” (Salve el oro de Suiza), exige que la BNS pare sus ventas de oro, que repatrie todo el metal amarillo conservado en el extranjero y que constituya unas reservas de oro por al menos un 20% de sus activos.  “El oro es una garantía de independencia”,  afirmaba el comité en Berna.

Además el UDC opina que conservar un tal zocalo en los cofres del BNS (actualmente 1040 toneladas de oro), es indispensable para garantizar la estabilidad del franco suizo.  El banco nacional no debe vender su oro, y dejar de apostar por divisas extranjeras con un futuro incierto.

Ese suelo evitará al banco el tener un balance únicamente en euros, por tanto deudas, que compra sin control imprimiendo francos suizos, ha explicado de esta forma el consejero nacional suizo Ulrich Schlüer.  “Las deudas de hoy serán los impuestos del mañana”.

Entre más altos sean  los riesgos ligado al papel moneda, más importante es tener suficientes reservas de oro.  En los últimos seis años el Bns ha imprimido más billetes que la Fed.

En paralelo ha vendido sus reservas de oro (más de la mitad desde el año 2000), “por tanto es necesario corregir el tiro  e impedir que esto prosiga” afirmaba asi Luzi Stamm.  Esta iniciativa llega en el buen momento ya que el pueblo suizo se ha dado cuenta que vender sus reservas de oro ha sido un error.

El Udc denuncia un BNS a merced del Banco central europeo y la Fed americana.  Eso debe cambiar, según ellos.

El partido conservador deja al BNS un plazo de 5 años para aumentar su partida en oro de 7.5 al 20% y repatriar el 20% de stock presente en el banco de Inglaterra y el 10% en manos del banco de Canadá.  Porque en caso de crisis grave estos socios podrían rechazar la repatriación.