Sinopsis: ¿Qué es lo que queda cuando el mundo se eclipsa y tiembla ante la amenaza de una muerte segura? ¿Qué es lo que queda cuando la esperanza se rompe en mil pedazos y tañen las campanas de la desolación? ¿Qué queda cuando las lágrimas forman charcos tan grandes que hacen que los océanos parezcan pequeños? Dime, ¿qué es lo que queda cuando el mundo se quiebra en dos y ni el mayor de los milagros es suficiente? En ese momento, lo único que queda son héroes. O quizá no quede nada…
MI OPINIÓN.- Allá por noviembre del año pasado leía el primer libro de la saga, en aquel momento conocí la narrativa de Ismael y quedé encandalida, un par de meses más tarde seguí con la saga y me quedé en stand by y así me ha tenido Ismael durante 10 meses más... y se hace largo..
Tenía muchas ganas de leer El Último Ángel, libro que cierra la trilogía del Legado de los Dioses.. asique no os extrañará que me lo haya leído en un día..
Al principio me costó un poco cogerlo.. pues después de 10 meses sabía más o menos dónde nos habíamos quedado, pero no en qué punto exacto.., pero eso solo fueron las dos o tres primeras páginas, porque enseguida estaba inmersa en la nueva aventura.
Una aventura que se caracteriza por la voluntad, las ganas de sobrevivir por encima de todo, el amor fraternal, y el amor más puro y más sentido.
Batalla hay, pero tampoco se le da mucha importancia, a pesar de lo cruenta que te la puedes imaginar a mi me ha sabido a poco, se centra más en los personajes, en sus voluntades, en sus pesares, en como se sobreponen a la adversidad.
Por supuesto tenemos aventuras y búsqueda de tesoros, en este caso son cuatro, pero como ya os digo no se le da importancia a la búsqueda, sino al desarrollo de la misma, y a la evolución de sus personajes, su madurez.
Ismael sigue en su línea, la lectura sigue fluida, agil y sencilla, quizás le ha dotado de más pasión, o por lo menos yo no podía parar de leer. Estaba cansada, me dolían los ojos, la cabeza, tenía sueño, y sin embargo no podía.. por la calle, en el ascensor, en el autobús, casi a oscuras (y mira que no me gusta leer de noche)... Quizás Ismael le ha dotado a este último libro de esa pasión, de esas ganas de saber el desenlace fatal...
Cierto y verdad que llegas a un punto (y no voy a desvelar nada), en el que dices... y esto? así de repente? pero cómo? pero luego sigues leyendo y entonces te empieza a cuadrar.. y ya al final.. y cuando digo al final me estoy refiriendo al épilogo dices.. ahora sí.. y es que como toda novela que tiene su puntito de fantástica, de aventurera, también tiene su punto de romántica, y sí o sí.. nos gustan que las cosas acaben bien.. que tengan ese final redondo.. y Contreras se lo ha dado.
Y a pesar de que en el anterior había malos malísimos que traicionaban, humillaban y demás cosas malas malísimas.., en este tercer ejemplar se ensalza la valentia, la sencillez, la humildad, la bondad, y el ser buena gente.., está claro que tenemos malos malísimos...,, pero como contrapunto tenemos buenos buenísimos, no medias tintas...
Y cuando ya no te queda esperanza?? Quedan héroes.. y en este libro hay muchos