Sobre el siglo II d.C. en el actual Iraq tuvo lugar el nacimiento de un nuevo movimiento religioso, el maniqueismo, que toma el nombre de su fundador, Mani, quien recibió la misión divina de crear un nuevo culto, caracterizado por una visión dualista del mundo, que bebía del cristianismo, el budismo o el zoroastrianismo.
Esta religión se fue extendiendo por buena parte de Eurasia. Desde la Hispania romana hasta China se organizaron comunidades maniqueas. Sin embargo esta religión acabaría siendo sucumbiendo ante el cristianismo y el islam en occidente, de la misma forma en oriente acabaría desapareciendo.
O no.
En 2005 un grupo de académicos de universidades australianas se decidió a realizar una expedición a la provincia de Fujian con el objetivo de investigar los restos arqueológicos del maniqueismo y el cristianismo católico y nestoriano en la región, datados del período mongol. Probablemente no esperarían encontrar a nadie que a día de hoy aún mantuviese algún culto a Mani, pero eso es precisamente lo que acabaron encontrando.
En un poblado de los que visitaron, fueron informados por los lugareños de que uno de los aldeanos poseía una estatua de Mani. Aunque este se mostró reticente a llevar dicha figura a los investigadores, finalmente accedió a guiarlos hasta su casa, donde pudieron contemplarla en medio de la capilla familiar.
Es posible que este culto estuviese inspirado por la reciente atención que había recibido la estatua de Mani en la capilla de la colina de Huabiao gracias a la UNESCO, y por tanto sin relación con el maniqueismo histórico. Sin embargo la estatuilla familiar tenía un estilo diferente, lo que no permitía relacionar ambas obras. Además, el mismo propietario de la estatua informó de que esta había sido heredada desde hacía varias generaciones por parte de la familia de su esposa.
Es posible, sin embargo, que la familia en cuestión careciese de conocimientos sobre la teología maniquea. Sin embargo, este episodio demuestra la continuidad del maniqueismo en la región, aunque solo sea en los aspectos devocionales.
BIBLIOGARFÍA
- “A living Mani cult in the tweny-first century” de Majella Franzmann, Iain Gardner y Sam Lieu