El último viaje del Emperador

Por Inshalatravel @inshalablog

Un año después de abdicar en su hijo Felipe, el emperador Carlos I de España y V del Sacro Imperio Romano Germánico, abandona Bruselas y se dirige hacia el puerto de Flesinga en los Paises Bajos. Tras unos días en Gante (su ciudad natal) llega al puerto situado en la isla de Walcheren, donde embarcará en la galera "Espiritu Santo", también conocida como "La Bertendona" con rumbo a España, más concretamente al puerto de Laredo, en el Cantábrico. Comienza el último viaje del que en ese momento es el hombre más poderoso del mundo.

Es el día 17 de Septiembre del año 1556, cuando parte la comitiva imperial, formada por 56 barcos. El emperador ha tomado la decisión de retirarse al remoto monasterio de Yuste, en Extremadura, lugar de sosiego y recogimiento, para llevar una vida sencilla y prepararse con devoción para una cristiana muerte. Hace tiempo que su delicado estado físico y anímico le hacen sospechar que ha contraído la enfermedad de su madre, la reina Juana I de Castilla y piensa que el momento de su muerte esta cerca.

En el viaje le acompañan sus hermanas María y Leonor, la comitiva esta formada por más de 150 personalidades y una vez en ruta sale a su encuentro una escuadra inglesa enviada por la reina María Tudor, esposa de su hijo Felipe II para rendirle honores, posteriormente la flota tuvo que permanecer unos días en el puerto de Dover a causa de un temporal. Finalmente el día 28 de Septiembre la flota llega a Laredo. Hecho que fue largamente festejado por la población.

No es hasta el día 5 de Octubre que la real comitiva parte hacia su destino final en la tierra extremeña de la Vera, además tuvo que ser dividida en dos grupos, ya que no en todas partes era posible alojar a más de 150 personas.

Son muchas las poblaciones por las que pasa y pernocta una o varias noches el monarca, en al menos 30 de ellas ha quedado constancia de este hecho, entre otras: Colindres y Ramales de la Victoria en Cantabria, Lanestosa en Vizcaya, Medina de Pomar, Hontomín, Burgos y Celada del Camino en la provincia de Burgos, Torquemada y Dueñas en Palencia, Valladolid, Valdestillas y Medina del Campo en Valladolid, Alaráz y Peñaranda de Bracamonte en Salamanca, El Barco en Ávila y Tornavacas, Jarandilla de la Vera y Cuacos de Yuste en Cáceres. Más de 94 leguas de recorrido por la Castilla histórica (550 kilómetros).

El emperador llegó a Jarandilla de la Vera el 12 de Noviembre de 1556 y estuvo alojado en el Castillo de los Condes de Oropesa (actualmente Parador Nacional), a la espera de la conclusión de las obras del palacio anexo al monasterio de los Jerónimos que se esta construyendo para el ilustre huésped. El día 3 de Febrero de 1557 llega finalmente a Yuste, donde se dedicará a la vida contemplativa, a la pesca, a oír misas y a sus relojes, hasta el momento de su muerte en Septiembre del año 1558 a causa de unas fiebres palúdicas.

Acaban así los pasos de este viajero infatigable que recorrió Europa en pos de realizar su sueño de unificar el continente bajo un mismo imperio y una misma religión.

Muchos de los pueblos por los que pasa este itinerario, conservan tradiciones y lugares relacionados con este histórico viaje, como es el caso de Laredo, Medina de Pomar o Jarandilla de la Vera. La ruta además de en coche se puede realizar a pie y forma parte de la red de Itinerarios Culturales Europeos. Existe también una red de las rutas europeas del emperador Carlos V, en la que esta incluida como es natural esta de la que hoy os hemos hablado.

Pepe

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