The Japan Times, 13 de Diciembre de 2011
Tokyo Electric Power Co. (TEPCO), la operadora de la central nuclear de Fukushima I maltrecha, ha venido insistiendo que la culpa del accidente nuclear fue el enorme tsunami que golpeó la planta justo después del terremoto del 11 de marzo. Sin embargo, las últimas evidencias demuestran que la fusión del núcleo del reactor 1 fue en realidad por causa del terremoto en sí mismo.
De acuerdo con un periodista científico versado en la materia, TEPCO tiene miedo de que si se determina que el seísmo fue la causa directa del accidente, el gobierno se vería obligado a revisar por completo la normativa de resistencia contra terremotos, lo que podría retrasar durante años la puesta en marcha de las centrales nucleares suspendidas en la actualidad debido a inspecciones de seguridad.
El periodista es Mitsuhiko Tanaka, antiguo ingeniero responsable de diseño de la vasija de presión del reactor 4 de la central nuclear de Fukushima en la compañía Babcock-Hitachi K.K.
Tanaka dice que si el terremoto causó daños en el sistema de tuberías, provocando lo que se denomina un "accidente de pérdida de refrigerante (LOCA)", nos enfrentaríamos a un problema totalmente nuevo —el de la vulnerabilidad a la resistencia sísmica de la estructura del núcleo del reactor— y por ello sería necesario revisar totalmente la normativa del gobierno para las plantas de energía nuclear en Japón, un país frecuentemente azotado por terremotos.
Dicha revisión podría llevar años de estudio, lo que imposibilitaría el reinicio de las centrales nuclearas actualmente suspendidas para el año que viene, tal y como espera TEPCO.
La cuestión que más desconcierta a Tanaka es por qué los condensadores de emergencia, que convierten el refrigerante vaporizado en agua y se utilizan para reducir la presión y la temperatura del reactor, no estaban funcionando en el momento del accidente, a pesar de que los condensadores tienen la capacidad de actuar incluso cuando hay un corte en el suministro eléctrico.
Es bastante probable, dice Tanaka, que las tuberías que conectan con los condesadores se dañaran durante el terremoto, haciendo que el refrigerante se filtrara y causando un mal funcionamiento de los mismos.
En un informe publicado el 23 de mayo, TEPCO dijo que había ordenado detener los condensadores de emergencia justo después del terremoto pero antes de que el tsunami llegara con el objetivo de que la temperatura de la vasija de presión no variase en más de 55 grados centígrados por hora. Esto, dijo, estaba estrictamente de acuerdo con las instrucciones contenidas en el manual de operación.
Cuando una comisión especial de la Dieta (máximo órgano legislativo del Estado) de Japón se dispuso a investigar el incidente (de la fusión del núcleo del reactor 1) solicitó a TEPCO una copia de dicho manual, y como respuesta le fue entregada una serie de documentos con la mayoría de las páginas censuradas, ya que la compañía alegaba que estos contenían información confidencial que no podía ser de dominio público.
Insatisfechos con la respuesta, el comité ordenó a TEPCO que entregara el manual completo en su forma original, la compañía cumplió con la solicitud el 24 de octubre. Esto llevó al periodista a la conclusión de que la operadora pretendía ocultar la verdad.
Tanaka dice que el dato de 55 grados centígrados por hora es una cifra utilizada comunmente en cualquier planta en una situación de no emergencia para mantener las tuberías en buen estado y que la cifra no debe utilizarse en caso de emergencia. Señala que el manual especifica que esta cifra debe seguirse en las operaciones justo antes de una parada fría de un reactor, no inmediatamente después de que haya surgido un problema.
En una conferencia de prensa el 15 de mayo TEPCO dijo que de acuerdo con su simulación, la fusión del núcleo del reactor 1 ocurrió 15 horas después del terremoto debido a que el tsunami había destruido los generadores de suministro eléctrico de emergencia y el nivel del agua en el reactor había bajado rápidamente. Sin embargo, Tanaka dice que la simulación contrasta con la medición real de los niveles de agua y presión.
Un rápido aumento de la presión dentro de la vasija de contención resulta excepcionalmente anormal. La simulación muestra que la presión en el interor de la vasija de contención se disparó a más de siete veces la presión atmosférica estándar alrededor de las 5:40 am del 12 de marzo, 15 horas después del terremoto, pero lo cierto es que la presión ya había aumentado seis veces más de lo normal hacia las 12:12 am del 12 de marzo, cinco horas antes de lo reflejado en la simulación.
Los datos de una simulación calculada por ordenador pueden ser fácilmente manipulados en función de los parámetros de entrada. Tanaka sospecha que TEPCO preparó a conciencia los resultados de la simulación para sus propios fines en un intento de engañar al público.
Atsuo Watanabe, antiguo diseñador de estructuras de contención en Toshiba Corp., dijo el 26 de octubre que la causa fundamental del fallo en la seguridad de la planta de Fukushima era probablemente la ciega aceptación de las normas de seguridad en los EEUU, que no tienen en cuenta todas las posibles consecuencias de los terremotos.
Los reactores de Fukushima dañados eran del tipo GE Mark 1, diseñados y construidos por General Electric Co. Watanabe señaló que en los EEUU no hay necesidad de considerar la combinación de un terremoto y un accidente de pérdida de refrigerante causado por rotura de tuberías, y añadió que es razonable suponer que ambos se produjeron simultáneamente en la planta de Fukushima.
Tal vez fuera esa la razón por la que TEPCO censuró las partes importantes del manual de operaciones de los reactores, ya que hay otros 10 reactores de tipo GE Mark 1 en Japón.
Estos y otros hallazgos científicos han dado lugar a serias sospechas sobre el argumento utilizado por TEPCO de que la crisis en la central nuclear fue causada por el tsunami, y no por el terremoto. Y la hipótesis de que el seísmo fue el verdadero culpable va cobrando cada vez más fuerza.
Es necesario que la comisión especial de la Dieta investigue hasta el fondo la verdadera causa del accidente. Una de las medidas que debería tomar sería obligar a que testifiquen los empleados de TEPCO que trabajaban en la planta en el momento del accidente, a pesar de que hasta el momento la compañía se haya mostrado obstinadamente reticente a que sus trabajadores den a conocer su testimonio.
Si el gobierno diera permiso para reanudar las centrales nucleares en varias partes del país teniendo en cuenta únicamente las opiniones de TEPCO la nación entera podría enfrentarse a desastres similares en el futuro y no podría cumplir con su responsabilidad ante el mundo entero, por lo que se espera que Japón lleve a cabo una investigación exhaustiva para determinar la verdadera causa de la catástrofe de Fukushima.
(Traducido de "Real cause of nuclear crisis", The Japan Times, December 13, 2011)
Si buscas información de la crisis de Fukushima, en este post puedes encontrar una cronología de acontecimientos actualizada.