¿Qué es lo que mantiene a este pequeño grupo de verderones tan aquerenciado a este lugar? Pues seguramente que en esta zona hay una mancha bastante extensa de una de sus plantas favoritas en esta época del año, la mercurial Mercurialis annua, la cual consumen con bastante avidez, en especial sus semillas.
Aunque otros fringílidos gozoniegos como el jilguero o el verdecillo ya han comenzado a cantar desde hace bastantes días el verderón aún no lo ha hecho, siendo uno de los más tardíos en este sentido. Por ello se encuentra en estos pequeños grupos, bastante más pequeños que los compuestos por otras especies, que permanecen asentados en las zonas donde encuentran alimento.
Hacia el final del invierno estos grupos se disolverán y los verderones se asentarán en sus zonas de cría, áreas de campiña con un mínimo de arbolado. En los jardines y parques urbanos es una especie frecuente y llega a establecer pequeñas colonias.