El videojuego basado en la nueva película ‘Kung Fury’, ya disponible en Steam

Publicado el 29 mayo 2015 por Coliseodigital @coliseodigital

Su nombre es ‘Kung Fury: Street Rage’ y presume de una envidiable estética basada en las máquinas arcade de los 80 

Todos recordamos aquellos grandes títulos: ‘Vigilante’, ‘Street of Rage’, ‘Double Dragon’, ‘Final Fight’, ‘Renegade’… arcades de lucha o yo contra el barrio, como se les denomina recientemente. Todos ellos nos sumieron en una época de mamporros y héroes que se las veían contra pandillas de marginados, macarras y esbirros de bandas callejeras. Pues bien, toda esa parafernalia ha quedado muy bien plasmada en la película (de tan solo 30 minutos de duración) ‘Kung Fury’, llevada a término por un grupo de suecos que se han inspirado en la década de los 80, ambientando su film en el año 1985, para ser más exactos.

La gran campaña de marketing que están realizando los chicos de Lasers Unicorns, los productores de la película ‘Kung Fury’ -que desde el pasado 28 de mayo ya está disponible en su canal de youtubeno cesa, y al disco de vinilo transparente con la canción True Survivor (perpetrada por el ínclito David Hasselhoff), se une ahora el videojuego.

Este nuevo título basado en el film del mismo nombre, no deja de ser un beat`em up de toda la vida, en el cual debemos acabar con hordas de enemigos que salen a nuestro paso para hacernos morder el polvo. Teniendo en cuenta que la película es un desternillante intento por dar rienda suelta a todos los clichés de los años 80, el juego no podía ser menos, con lo que veremos pasar a todos los personajes que se dan cita en la misma. Hitler es nuestro archienemigo, por lo que nos enfrentaremos a los ejércitos de este hiper-famoso personaje, asestando nuestros golpes sin parar.

‘Kung Fury: Street Rage’ se vende en Steam a un precio de 1,99 €, una cantidad pequeña para un título que solo pretende alargar la vida del film y no va a pasar a los anales de la historia, pero que puede hacer pasar un rato divertido a quien lo pruebe.