La populista Keiko Fujimori (der) y su rival Pedro Pablo Kuczynski (izq) se encuentran en empate técnico. AFP
Lima 09 Junio 2016. - Las primeras cifras en Perú confirman lo que apuntaban las encuestas a pie de urna: una derrota inesperada y por la mínima de la derechista Keiko Fujimori y una victoria de Pedro Pablo Kuczynski
Hacia las siete de la tarde del martes 08 de Junio 2016, con el escrutinio oficial del 99,06%, Kuczynski (PPK) se mantenía por delante con el 50,16%, mientras Fujimori lo seguía con el 49,83%. Tras haberse acortado la distancia hasta una diferencia del 0,12% en el cómputo previo, es casi seguro que la pequeña diferencia de votos que va a determinar que el destino de Perú se mantendrá a favor de Kuczynski, originando la elección presidencial más apretada en la historia del Perú.
Fujimori había estado cerca de ser elegida en 2011, cuando se enfrentó a Ollanta Humala. Entonces, solo la coalición electoral de las fuerzas democráticas del país con Humala alcanzó la fuerza necesaria para derrotar a Fujimori y reforzar el antifujimorismo de las fuerzas democráticas
Tras su derrota, Fujimori hizo una campaña diligente durante los siguientes cuatro años por casi todo el país, construyendo o reconstruyendo su partido. Cultivó también una imagen independiente, reconociendo los excesos perpetrados durante el Gobierno de su padre y comprometiéndose a que ello no volvería a suceder más.
Eso le bastó para ganar las elecciones de abril, conquistar una mayoría holgada en el Congreso y prepararse con optimismo para la segunda vuelta contra un candidato respaldado por la izquierda liberal y la ola de antifujimorismo de última hora, en este caso para frenar a Fujimori, logrando un efecto sorprendente.
Todavía el futuro de Perú es incierto, a falta del conteo del voto extranjero y algunas zonas del Sur.
La Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) tendrá hasta este domingo para comunicar los resultados de una elección histórica.