Elecciones Europeas: Bipartidismo en decadencia

Publicado el 27 mayo 2014 por Elchesemueve Alberto Díaz Calatayud @Elchesemueve

Las Elecciones Europeas de mayo de 2014 nos ha dejado un mensaje claro: El bipartidismo agoniza. Por primera vez en toda la historia de nuestra "democracia" los dos principales partidos, PSOE y PP, no han sacado el 50% de los votos. Con una abstención que ha superado más de la mitad del electorado, la ciudadanía que ha ido a votar ha expresado, de manera rotunda, que no quiere seguir igual, que necesita cambios urgentes y que los dos partidos más corruptos e ineptos que España ha conocido, están en el punto de mira.

Y no es una expresión fruto de ninguna frustración personal, que también la hay, sino que los datos -por desgracia- me dan la razón. Ambos suspenden de manera vergonzosa en los índices de la mismísima UE, donde en enero de 2014 les daba una nota de 1.9 sobre 10, es decir, muy deficiente. Los resultados han sido claros y llamativos, dotando a los pequeños partidos de un protagonismo que nunca antes tuvieron.

Es, sobre todo, un mensaje para el actual partido en el gobierno, el PP. Nuestra democracia no puede seguir consintiendo que unos señores, cada cuatro años, se apoltronen en el poder y hagan lo que les venga en gana, incluso saltándose a la torera cualquier promesa pre-electoral, como ya hizo Mariano Rajoy en 2011. Llegó con un programa electoral que luego, no solo no ha cumplido, sino que ha hecho exactamente lo contrario. En cualquier democracia avanzada esto significaría la dimisión inmediata por incapacidad o, simplemente, por no poder cumplir con sus electores. En España, no, ni siquiera ha habido una explicación, ni convincente ni pueril, directamente ninguna.

Debemos saber qué hacen estos sujetos con nuestro voto, por qué toman determinadas decisiones y a quién benefican con ellas. Qué hacen con nuestros impuestos, en qué se gastan nuestro dinero y los motivos de ello. Los ciudadanos necesitamos saber a quién votamos, no enterarnos después de poner nuestra papeleta qué ministros nos van a gobernar. Queremos saber quiénes van en las listas y votar a las personas que creamos convenientes y, por supuesto, no admitir corruptos o presuntos corruptos en las mismas.

Necesitamos que nuestros políticos voten en conciencia las Leyes, no por imposición de aparatos de partido. Eso no es democracia, es otra cosa, más parecido a la Mafia. Queremos que expliquen todas y cada una de las decisiones que toman en nuestro nombre, no que se escondan tras una pantalla de plasma y no admitan preguntas de la prensa. Exigimos a gente preparada para cada puesto, no designaciones a dedo de "amiguetes" fieles al partido de turno, sin criterio propio y que lo único que han hecho en la vida es afiliarse con 18 años y decir sí a todo.

Como quiera que nos han dejado solo la opción de elegir cada cuatro años, las consecuencias ya se están viendo. Viene un cambio radical en el mapa político. De hecho, viendo a algunos afamados tuiteros y sus reacciones, el miedo y la frustración ya empiezan a campar a sus anchas por este país. Lo más triste de todo esto es que, en vez de hacer autocrítica, se dedican a difundir el miedo a lo que viene, en plan apocalipsis bíblico. Una muestra más del nivel intelectual de nuestros dirigentes y de los adláteres que les siguen el juego.