Anotación Previa
Como he anunciado vía Google Buzz y Facebook, ha llegado el momento de analizar uno por uno a los candidatos presidenciales (los 6 principales), y sus respectivos programas. Iniciaré por el heredero del Presidente Uribe, el hombre que antes de lanzar su campaña presidencial ya lideraba las encuestas de intención de voto. Dejaré como último a mi candidato preferido, por quien voy a votar en primera vuelta, es decir, a Germán Vargas Lleras. Iniciemos esta serie de ingresos, con Juan Manuel Santos.
El candidato
Juan Manuel Santos es de aquellas personas que ‘nació para ser Presidente’. Su ascendencia, su enfoque educativo y su trayectoria en el sector público y privado así lo demuestran. Es una persona con objetivos claros, que le han permitido culminar exitosamente dos carreras (Economía y Administración de Empresas), con varias estudios de postgrado, en materia de diplomacia y periodismo. Doctor honoris causa, ha cumplido funciones a nivel del gobierno como Ministro de Comercio Exterior, Ministro de Hacienda, Ministro de Defensa.
Imagen tomada de: www2.esmas.com
Santos ha sido el claro jefe visible del Partido de la U, principal soporte del Presidente de la República actual en el Congreso. También ha fundado y dirigido la Fundación Buen Gobierno, y se ha desempeñado en otros importantes cargos en el sector privado. Su apellido, en Colombia, es sinónimo de poder. Descendiente del expresidente Eduardo Santos, ‘hijo’ del diario El Tiempo, el más poderoso e influyente del país durante largo tiempo, ha vivido la política y el periodismo desde su nacimiento.
Ha sabido capotear dificultades con habilidad, empezando por el hecho de que su primo Francisco Santos se le hubiera atravesado en el mundo político de manera inconsulta y sorpresiva. A pesar de ello, supo ganarse la confianza de Álvaro Uribe, como en su momento lo hizo con Andrés Pastrana, y ha sido líder indiscutible de los diferentes estamentos que conforman la seguridad del Estado.
Es la primera vez que Santos se enfrenta a un proceso de elección popular, aunque ha manejado el asunto como una persona experimentada.
El programa
Quien ingrese a la página del candidato Santos encontrará que su plan de gobierno se encuentra descrito en 109 puntos, organizados por diferentes temas. Se le permite al lector acceder a 4 documentos en formato .pdf. Estos documentos son los planes de educación (1), trabajo (2), seguridad (3), y el plan de gobierno completo (4). Sin embargo, esta gaviota intentó acceder a todos ellos para revisarlos detenidamente, por medio de dos navegadores de Internet diferentes, y no fue posible acceder a estos documentos. Por ello, el análisis del programa se limitará a los enunciados que se encuentran previstos en los 109 puntos.
Entidades de Gobierno a crear por el gobierno de Santos: Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio; Ministerio del Trabajo y el Desarrollo Laboral; Ministerio de la Salud y la Vida Sana; Ministerio del Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible; Ministerio de Justicia; Comisión Reguladora del Sector Transporte.
En consecuencia, si llega a ser Presidente, Santos va a volver a separar los mismos ministerios que el Presidente Uribe unió. ¿Eso es no echar para atrás? ¿O es que el Presidente Uribe se equivocó? Este aspecto no ha sido seriamente cuestionado al candidato, quien ha manifestado como uno de sus lemas, que retroceder no es una opción. Además, se cuenta como novedad la comisión reguladora del sector transporte.
Es muy importante destacar el papel que juega el concepto de ‘buen gobierno’ en el plan de gobierno de Santos. Como él mismo lo ha manifestado, no en vano ha creado y liderado durante largo tiempo la fundación que lleva el mismo nombre, y cuyo objeto puede ser consultado en la página web de la Fundación Buen Gobierno. Lamentablemente, en el desarrollo de los puntos, se queda el buen gobierno como un enunciado que ya está dado, y no se explica cómo se habría de implementar el buen gobierno en sus programas de gobierno. Sin embargo, la idea por sí misma debe ser destacada.
Como era de esperarse, lo más fuerte del programa de Santos es lo relativo a defensa, y sorprende ver la importancia que le concede al tema de salud. Sin embargo, temas como el deporte, el problema pensional y las relaciones internacionales son olímpicamente omitidas por el candiato, lo que resulta inexplicable, teniendo en cuenta que el mayor riesgo que se siente con su campaña son precisamente las relaciones internacionales. En vez de afrontar esta debilidad, el candidato Santos la omite.
Al revisar el programa de Santos, encuentra uno que muchos de los 109 puntos están lleno de ‘frases célebres’. Realmente, no son muchos los ‘desarrollos’ programáticos que pueden verse en su página web www.juanmanuelsantos.com. Para efectos ilustrativos, me permito citar uno de los puntos contenidos en la página, que permite ejemplificar mi punto:
56. LOS ABUELOS SABRÁN QUE NO LOS OLVIDAMOS
Avanzaremos hacia un sistema pensional incluyente, con beneficios para muchos más colombianos. Nos ocuparemos de la población de tercera edad más pobre y vulnerable con recursos del presupuesto nacional, pero sin desincentivar la cotización y la formalización.
En materia de cifras, es valiente en materias como el empleo, donde se trazan metas claras, así como en lo relacionado con el tema de vivienda e innovación. Es claro del programa de Santos que se va a seguir impulsando la economía colombiana mediante la explotación de los hidrocarburos, el fomento del turismo y atrayendo inversión extranjera. En ese sentido, parece ser fiel a la propuesta del Presidente Uribe.
Los debates
Definitivamente, el fuerte de Santos no es hablar en público. Si bien demuestra una serenidad envidiable al momento de afrontar cualquier clase de comentario, pareciera que no tuviera la claridad de lo que fuera a decir. Contrastado frente a los puntos que aparecen en su programa, es claro que sus manifestaciones al interior del debate son consecuentes con lo mencionado. En ese sentido, es importante abonarle el factor de coherencia en su discurso.
Santos ha logrado transmitir al público que es una persona preparada y con una trayectoria pública exitosa. Esto último es de vital importancia al momento de capturar electorado, sobre todo, entre quienes buscan depositar un voto útil (es decir, que pueda desequilibrar la balanza a favor de alguno de los candidatos de punta). Esa preparación en diferentes campos como la hacienda pública, la economía, el comercio exterior, la política pura y la seguridad, lo posicionan como una persona capaz de manejar el país. Este elemento casi se ha dado por descontado, y tan solo en el último debate, el candidato Germán Vargas Lleras cuestionó sus resultados como Ministro de Comercio Exterior y como Ministro de Hacienda. Los cuestionamientos como titular de la cartera de defensa siguen a la orden del día, pero Santos ha sabido minimizar su trascendencia. Eso dennota habilidad.
Algunos electores no podemos desconocer la actitud soberbia del candidato Santos al momento de iniciar la tanda de debates, negándose a asistir a unos debates cuando se encontraba sólido en la punta de las encuestas. Esa soberbia ahora que intenta acercarse al público, puede resultar costosa.
Habiendo tenido algunas situaciones comprometidas en los debates, afrontando ataques de Noemí Sanín, logró apostar en el momento adecuado, deslegitimando a su contendora. No ocurrió lo mismo en el caso de Pardo, en donde fue seriamente cuestionado por una de sus salidas en falso. Esto último ha sido una de las críticas más fuertes a Santos como ministro. Haber celebrado el fallido golpe a Chávez en Venezuela, sacar declaraciones en las que se excusa por ser ‘culipronto’, o las acusaciones a Pardo, en su momento, han constituido escenas bochornosas que preocupan. No es lo mismo cometer esa clase de errores como Ministro, que como Presidente de la República.
No ha salido como ganador de los debates, porque no ha logrado transmitir proyectos de gobierno propios. Su desmedida lealtad hacia la figura del Presidente Uribe lo muestra como un continuador del mandatario actual. El problema es que esa misma lealtad fue profesada hacia Pastrana, y otros más. Esa capacidad de cambiar de parecer genera cierto temor hacia lo que ‘realmente’ haría si llegara a la jefatura de Estado. Todavía no se ha aclarado si Santos sí buscó pactos con la guerrilla para derrocar a Samper. Este episodio turbio, genera dudas que no ha logrado despejar Santos en los debates.
Sería bueno que Santos desarrollara programáticamente la prosperidad democrática como un proyecto propio, y no como un apéndice de la seguridad democrática de Uribe. En los debates, pareciera que siempre se enfocara en explicar la seguridad democrática, y no en explicar el alcance real de su prosperidad democrática.
Adicionalmente, ha debido enfatizar mucho en su capacidad para formar buenos equipos de trabajo. Esto último lo ha mencionado, pero tibiamente. A diferencia de Mockus, en donde no es claro cómo y con quién gobernaría, Santos tiene experiencia en montar y desarrollar proyectos exitosos, tanto en lo público como en lo privado. Ese factor diferencial debería explotarlo más.
¿Sabía usted?
En la página oficial de la campaña de Juan Manuel Santos, hay noticias que no han sido debidamente difundidas, y que conviene mencionar a los lectores de este espacio. Me he encontrado con algunas sorpresas, por lo trascendente de la noticia, y que ha pasado desapercibida ante el mediocre cubrimiento por parte de los medios. He aquí algunos datos que probablemente usted no conocía:
a. Santos planea que la Fiscalía sea parte del Ejecutivo, y por ende, dependa del Presidente. b. La meta de Santos para el desempleo al final de su eventual mandato (2014), es estar por debajo del 9% en el indicador de esa materia.c. Santos propone regular lo relativo al sector salud mediante la expedición del Estatuto Único del Sector Salud, que unificará la normatividad existente.d. Se proponen incentivos para el crecimiento de la industria del entretenimiento.e. Fija como meta la reforestación de 100.000 hectáreas por año.f. Santos considera que el sector financiero colombiano (bancos, aseguradoras, fiduciarias, entre otros) se encuentra adecuadamente regulado y supervisado.