La ubicación: Cerca de casa, importante para evitar desplazamientos en coche privado o público. Además ello beneficiará en la reducción de gastos innecesarios dentro de la familia. Las instalaciones: El peque debe estar en un ambiente agradable, atrayente, colorido, alegre… al igual que las instalaciones que proporciona el centro, debe adaptarse a las normas de seguridad. Las aulas, iluminadas con luz natural, soleadas. La zona de psicomotricidad con aproximadamente 30m2 de espacio, que a su vez muchos de los centros lo aprovechan para las fiestas o charlas familiares del centro. Los patios, al exterior, soleados con una parte de sombra, y juegos apropiados para los peques, disponiendo de una zona de arena. Medidas de seguridad: Los enchufes deberán estar protegidos y los interruptores ubicados en la zona alta de la pared para que los peques no puedan alcanzarlos evitando los peligros. Las puertas con topes y forrados los laterales para evitar que los peques se pillen las manos o dedos. Los aseos deben estar adaptados a los infantes al igual que la zona de descanso que tendrá que estar dentro del aula independiente. Visitar la escuela, antes de tomar una decisión, seria la mejor opción para estar informados de todo y cada uno de los aspectos que ofrece el centro y así tener una visión del proyecto educativo que expone el centro infantil.
Primero; el centro debe ser legal, que cumpla con la legislación vigente y haya sido aprobada por la Consejeria de Educación.