Cobertura de Espectadores.
Ela volta na quinta es el título original de esta película brasileña que compite en la sección oficial internacional del 17º BAFICI, y que presenta al hasta ahora desconocido André Novais Oliveira. De hecho éste es su primer largometraje.
En pocas palabras, los espectadores nos asomamos a la convivencia que María José y Norberto llevan adelante como pueden, tras 35 años de casados. La posibilidad de una separación en puerta preocupa y amarga tanto a los esposos veteranos como a sus dos hijos adultos, uno de ellos el propio director.
Algunas escenas parecen dignas de un documental doméstico (como el que Gastón Solnicki hizo con Papirosen). Sin embargo, da la sensación de que Novais Oliveira recurrió a su entorno, no para revelar su intimidad, sino para llevar adelante un proyecto de ficción, a lo sumo apenas inspirado en el realidad.
Para los espectadores cansados del cine más o menos autorreferencial (salvo excepciones, claro está), el aspecto más interesante de Ella vuelve el jueves se manifiesta cuando los personajes abandonan la casa de los cónyuges en crisis. Constituyen verdaderas perlitas algunos frescos de la sociedad brasileña, por ejemplo los diálogos que Roberto mantiene, primero, con un nuevo ayudante laboral, segundo, con una clienta, luego, con una vecina. A su vez, las escenas filmadas en las afueras de Belo Horizonte nos trasladan de lleno al país vecino.