Director: Neill Blomkamp
Primero que todo, humildemente les dejo un dato no menor cuya razón de ser no es la fanfarria sino la curiosidad: ésta es la película estadounidense número doscientos en ser comentada, país que más entradas ha aportado a este blog. Que sea "Elysium" no significa nada, ya saben, así como si estuviésemos celebrando la ocasión. Con "District 9" el debutante Blomkamp nos ofrecía un digno espectáculo que ponía en el mapa a un director prometedor de notorio talento, así que su segunda película causaba atención casi por defecto, algo no del todo bueno ya que, como se ha comprobado con otros casos, las expectativas suelen ser un arma de doble filo que no miden películas de forma justa de acuerdo a su calidad inherente, más bien de acuerdo a lo que todos se imaginaban de ella. No es que Blomkamp haya decepcionado a todo el mundo y haya fracasado, nada que ver (prueba de ello es que al otro año hizo "Chappie" y ahora parece que va a dirigir una nueva entrega de "Alien"), estas palabras simplemente intentan introducir que "Elysium" es una buena y entretenida película que no causó mayor impacto porque su director ya hizo tal cosa con su opera prima; por lo demás, ya es hora de bajarlo del olimpo de la ciencia ficción, porque talento tiene, sí, pero no es que haya dado el golpe final aún o reinventado algo.
En un planeta tierra sobrepoblado y contaminado, los más millonarios hacen una pequeña colecta para largarse de una buena vez e irse a vivir al espacio exterior en una súperestructura llamada Elysium. Los pobres se quedan abajo muriéndose y soñando con vivir entre las estrellas. Matt Damon vive en la tierra, quiere vivir en Elysium, y un montón de problemas entre la tierra y el nuevo paraíso (siempre hay problemas en el paraíso) le dan una posibilidad de cumplir su tan anhelado deseo.
Las dudas sobre la verosimilitud de algunas escenas son numerosas, por ejemplo, ¿cómo es posible que Elysium no tenga ninguna nave que patrulle las afueras de la estructura (la que denominan "su" espacio: para la risa, ¿no?), ¿cómo es posible que una especie de bazuca lanzada desde la tierra misma pueda alcanzar en un santiamén a tres naves espaciales que están a millones de kilómetros de distancia?, ¿cómo es posible que un gobierno como el de Elysium dependa de un programa computacional que está en manos de un empresario de segunda?, ¿cómo es posible que, en general, la seguridad de la tierra y la de Elysium sea igual de mala?, ¿me van a decir que es creíble que la suerte de "coyote" espacial que cobra un dineral a los desesperados esconda un revolucionario justiciero social? Vamos... Cuestiones aparte, también están los tópicos de siempre y las salidas argumentales tan vistas anteriormente, por ejemplo, que todo comience por un accidente laboral que deja al accidentado con cinco días de vida que, miren ustedes, es justo el tiempo que necesitan los amigos para ayudarlo de manera legal y no-violenta, haciendo que nuestro protagonista se vea en la necesidad de recurrir a actos violentos e ilegales, y cómo olvidar la bondad del corazón ablandado, ese que deja de lado sus propios deseos para ayudar al más débil, en este caso su enamorada de toda la vida y la hija con leucemia avanzada e incurable. ¿Olvidé decir que en Elysium tienen unas máquinas que te curan todas las enfermedades, fracturas y demás, dando un efecto de inmortalidad? Pues bueno, ahí está el conflicto: Damon se va a morir, necesita ir a Elysium para curarse; la hija de la amada se va a morir, necesita ir a Elysium para curarse. Los altos mandos de Elysium también tienen sus propios dramas, no sólo que no desean que los terrestres pongan sus sucios pies en su idílico suelo. En resumen: el conflicto está bien planteado y sus partes están bien relacionadas entre sí, dando como resultado un relato intenso y perpetuo, que no ofrece descanso, más o menos como "District 9", y al igual que ésta, también están los baches rítmicos producidos por algo que a ciencia cierta no aporta nada al relato: el amor. Ok, que Damon hace cosas por amor, pero no se necesita insertar coloridos, edulcorados y melosos recuerdos para reafirmarlo, tampoco se necesitan sobrantes escenas de miradas y coqueteos ni nada similar, o peor aún, un horroroso cuento que de repente se vuelve la pieza central de todo propósito liberador. Así, entre acción y acción (bien filmada por Blomkamp, aunque con una cámara en mano que sigue mareando; en este caso el "bien filmada" viene a que las secuencias ofrecen a modo de espectáculo un conflicto decente), tenemos innecesarias pausas que además carecen de tempo visual, sólo relleno. Al final lo que nos ofrece el sudafricano es una lucha entre la individualidad y la solidaridad disfrazado de relato y crítica social, la que se entiende pero que no ofrece mayor aporte narrativo, y que avanza de manera creíble (dudas de verosimilitud aparte) en base al elemento contrarreloj, algo indispensable en Blomkamp (también lo usará en "Chappie"). Dirige con mano (no cámara) firme, aunque ya por el final se deja llevar por esa moda de filmar cada puta cosa en cámara lenta y con una ruidosa banda sonora de fondo que, me imagino, debe generar, cómo decirlo, adrenalina, aunque yo no sentí tal cosa, quizás porque en ese momento le bajé el volumen a los parlantes. Eso sí, admito que, cursi y forzado y todo, el final me pareció algo bonito, aunque también estaba que me partía de la risa con tanta buena onda en el aire (eso de "en realidad es un cuento bastante bonito" es para matarse...)
Entonces, ¿qué es o qué significa "Elysium" para (y dentro de) la filmografía de Blomkamp? Que, digamos, el tipo puede hacer buenas películas de acción, que puede darles cierto fondo, pero que necesita innovar y aprender a hacer de la crítica o la sustancia no sólo un agente narrativo activo sino que también parte de la imagen, para que ésta no decaiga cuando las cosas no se mueven a lo loco, pues cuando la calma llega, entonces nada está pasando aunque los diálogos sean tan obvios. Por lo demás, "Elysium" me ha gustado y la he pasado bastante bien con ella (aunque se acerca más a ser una de acción que a la distintiva e inteligente y/o atrevida "District 9"), así que no deberían evitarla si tienen la oportunidad. De Blomkamp hay que alejarse de su aura de fenómeno o niño genio actual de la ciencia ficción, pero eso el tiempo lo dirá.
Oh, y el tono de voz y el acento del villano sí que llega a irritar bastante, ¿no?