Empanada de chorizo estilo Akelarre

Por Juanbellas

Seguimos recordando viejos tiempos, tal vez por aquello de que cualquier tiempo pasado fue mejor….no sé….hoy me levanté un tanto nostálgico escuchando esta canción:

Pero bueno….aquí estamos para compartir recetas, con lo que vamos con esta.

Es una forma especial de hacer empanadas, como ya os puse en esta otra entrada:

Empanada de pollo estilo Akelarre

Hoy quiero traeros otra de similar formato, pero variando los ingredientes.

Esta forma de empanada la hace muy fácil de manipular.

Bien, vayamos con la receta en sí.

INGREDIENTES:

  • 2 huevos M-L
  • 200 ml. de leche
  • 200 ml. de aceite de oliva virgen extra
  • 200 ml. de vino blanco
  • 1 kg. de harina de trigo P-10 aproximadamente
  • 1 cebolla mediana
  • 1 diente de ajo
  • 1 pimiento verde
  • 1/2 pimiento rojo
  • 1/2 kg. de chorizo
  • 100 gr. de tomate frito
  • 1 huevo para pintar
  • Sal
  • Pimienta negra recién molida

Vamos a empezar haciendo la masa que luego dejaremos reposar una hora. También podríamos comprar la masa ya hecha, o masa de hojaldre mismamente. Ciertamente es más práctico pero, creedme, merece la pena hacerla. El sabor y la textura nada tienen que ver. Echamos dos huevos en un bol.

Añadimos un vaso, unos 200 ml. de leche. Hay quien emplea agua también, aunque con leche sabrá mejor y tendrá un aspecto más hojaldrado.

Añadimos otro vaso de aceite de oliva. Yo normalmente empleo el Virgen Extra para cocinar, salvo en algunas excepciones, como la mayonesa o aquí mismamente, ya que es un poco fuerte ese aceite. Aquí usamos aceite de oliva suave.

Y, por último, otro vaso más, este de vino blanco.

Lo vamos a batir bien.

Echamos una pizca de sal.

Tamizamos la harina que vaya admitiendo, que suele ser entorno a 1 kilo, para estas cantidades de líquido.

Vamos mezclando poco a poco, al principio con la ayuda de la batidora misma.

Luego ya, cuando se hace muy espesa la masa, con las propias manos.

Nos quedará una masa que se separa de las paredes del bol.

Esparcimos un poco de harina por una mesa y procedemos a amasar unos minutos la masa, hasta que veamos que no se nos pega en las manos. Podemos echar un poco más de harina, si es necesario.

Amasamos un poco más.

Al final, dejamos la masa reposar en un bol cubierta con un paño por espacio de 1 hora, más o menos.

Mientras tanto vamos con el relleno. Tomamos una cebolla.

La cortamos por la mitad, “de norte a sur”.

Le cortamos los extremos.

La “descamisamos”, procurando sacar la menor capa posible, pues es en las capas externas donde la cebolla concentra la mayor parte de las vitaminas.

Vamos a picarla. Primero le damos unos cortes paralelos, con medio cm. de separación.

Luego la giramos y le damos otros cortes transversales.

Nos queda toda picada.

Calentamos en una sartén amplia a fuego medio, 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.

Vamos a picar un ajo, mientras tanto.

Para pelarlo le damos un golpe con el lateral del cuchillo.

Ahora ya se podrá pelar sin problemas.

Primero lo laminamos y luego le damos otros cortes transversales.

Nos quedará todo picadito. Después de usar el cuchillo para cortar ajo nunca debemos refregarlo con un trapo, ni las manos tampoco. Ponemos todo, cuchillo y manos, bajo un chorro de agua y mojamos un poco. Echamos el ajo picado en el aceite, para que se vaya calentando.

Vamos a trocear un pimiento verde.

Lo cortamos por la mitad, de arriba a abajo.

Le vamos a sacar las semillas y aquella parte más blanca.

Las semillas.

Mientras tanto, ya vemos como el ajo empieza a “bailar” sobre el aceite. Es el momento de echarle la cebolla picada.

Mezclamos bien.

Como se trata de que la cebolla suelte el agua que lleva, le ayudará si le echamos una pizca de sal.

Mientras tanto, seguimos con el pimiento. Cada una de las mitades la cortamos, a su vez, en dos partes iguales.

Cada una de esas partes la cortamos en bastoncillos.

Y luego transversalmente. Nos quedará el pimiento verde picado.

Lo añadimos a la cebolla.

Mezclamos bien.

Hacemos lo mismo con un pimiento rojo, aunque, en este caso, solo empleamos la mitad.

Lo picamos al igual que el verde.

Y lo incorporamos a la mezcla anterior.

Mezclamos bien.

Vamos con el chorizo, en este caso 5 chorizos que hacen 500 gr.

Les sacamos la piel.

Y los vamos picando. No es necesario que queden muy finos, aunque eso es al gusto de cada uno.

Nos queda todo picado.

En ese momento, y cuando veamos que la cebolla esté como que transparenta, añadimos al refrito 100 gr. de tomate frito. Si no lo tenéis hecho en casa, es mejor comprar el que venden como “casero”, que no el “normal”.

Lo mezclaremos bien.

Echamos encima el chorizo picado.

Mezclamos todo bien.

Lo salpimentamos a gusto.

Subimos el fuego y lo tendremos unos minutos así. No es necesario que el chorizo se haga mucho, aunque, nuevamente, eso es al gusto de cada uno. Cuando veamos que el chorizo ya soltó grasa, inclinamos la sartén sobre un lateral para que se vaya el exceso de grasa. Ya fuera del fuego dejamos enfriar.

Vamos preparando la bandeja del horno. Cuando la mezcla de chorizo esté fría, o casi, encendemos el horno a unos 200º C si tiene ventilación y 220º C si no la tiene. Extendemos una lámina de papel de hornear sobre la bandeja.

Extendemos otro trozo de papel de hornear, del ancho de la bandeja, sobre la mesa de trabajo.

Cogemos un trozo de masa de unos 350 gr. y lo vamos a extender sobre el papel en la mesa de trabajo.

Lo vamos a extender con el rodillo. Si vemos que se nos pega la masa al rodillo, es buena idea colocar la masa entre dos tiras de papel.

Lo dejaremos del ancho del papel.

Colocamos dentro una capa de chorizo, sin que llegue hasta el borde mismo, pues ahí hay que sellar la empanada.

Cubrimos con una parte de masa.

Y cubrimos totalmente. Es importante que monte una masa sobre otra lo menos posible para sellar, pues cuanta más monte, menos se nos hará, quedando más cruda. Entonces montamos lo imprescindible para sellar, recortando el resto, si sobrara.

Doblamos sobre ella misma el papel de hornear que usamos de base y la llevamos a la bandeja cogiendo el papel por los extremos.

La depositamos en la bandeja, en un extremo, para ir dejando sitio a las otras.

Hacemos lo mismo con todas las que podamos sacar de esos ingredientes. Yo aquí saqué 3, pero creo que la primera llevaba bastante. Me sobró algo, pero si esa primera llevase menos podía hacer unas 4.

Batimos un huevo.

Las pintamos con huevo batido. Las metemos al horno, por espacio de media hora/ 40 minutos. Más o menos hasta que se dore la superficie.

Y, ya hechas, las sacamos del horno.

Dejamos enfriar un poco nuestra empanada y la vamos cortando rodajas. Buen provecho internautas ;-)