Y en todos los ámbitos políticos estará presente el fenómeno Podemos o Ganemos, o la marca que se inventen para los próximos comicios, que vaya tostón nos están dando con los Pablemos desde el pasado 25 de mayo…
El caso es que a nivel nacional el gobierno del Partido Popular, en el que tantos confiamos allá por 2011, tendrá que ponerse las pilas, sobre todo en el ámbito de la comunicación política, porque siguen sin explicar bien las cosas y sin conectar con una gran parte de los que los votaron. Y cada vez les quedan menos oportunidades. Y es que aunque parece que se está saliendo de la crisis, la gente de la calle todavía no lo tenemos muy claro y eso le puede pasar factura a Rajoy. Por otro lado tenemos al PSOE y su recién elegido Secretario General, Pedro Sánchez, partido que tiene que buscar su rumbo, porque como sigan así van a ser comidos por Podemos. Malos tiempos vislumbro para los socialistas; aunque peores van a ser para los de Izquierda Unida, que esos sí, ya han sido zampados por Pablo Iglesias y sus huestes. Y me he de referir a VOX, pues los últimos acontecimientos dejan muy tocada a esta formación, somos muchos los desilusionados con este proyecto, al que hemos dedicado mucho tiempo.
Tampoco me quiero olvidar de lo que vamos a vivir en unos días, la Diada en Cataluña y la convocatoria de referéndum. Soy de los que opina que no habrá consulta y que sí se convocarán elecciones al Parlament. Veremos.
En Andalucía poco cambiará la cosa, salvo un posible adelanto electoral, algo de lo que se habla mucho. Desgraciadamente la agenda política andaluza seguirá marcada por la corrupción y los autos de la Juez Alaya, una pena, pero es lo que tiene tantos años de partido único, estos últimos apoyados por Izquierda Unida, cómplices de los gobiernos de Griñán y Díaz.
Y en Córdoba más de lo mismo. José Antonio Nieto y el PP se tendrán que poner las pilas, porque aunque están haciendo muchas cosas bien, los descontentos con Rajoy le afectan directamente. El caso es que Córdoba tiene mucho que hacer, mucho trabajo por delante y el tiempo se acaba, Córdoba no se puede permitir el lujo de ver pasar más trenes.
El caso es que la cosa está como casi siempre. Veremos.