Por Lisa Girard¿Quieres iniciar un negocio pero aún no estás seguro en qué? Estos creativos ejercicios te ayudarán a encontrar tu idea para emprender.
Benjamin Disraeli, un primer ministro británico del siglo XIX, dijo una vez: “el hombre solamente es grande cuando actúa movido por la pasión”. Si quieres ser emprendedor, explorar las sendas de la creatividad para hallar tu pasión es tal vez la vía más rápida para incrementar tus posibilidades de abrir un negocio exitoso. ¿Por dónde empezar?
Aquí hay cinco ejercicios para ayudarte a descubrir tu verdadera pasión:
1. Recuerda tu infancia. ¿Qué te encantaba hacer? “Es sorprendente cuánto nos desconectamos de las cosas que nos causaban la mayor alegría para, en su lugar, favorecer lo que resulta más práctico”, dice Rob Levit, un experto en creatividad, orador y asesor de negocios de la ciudad de Annapolis, en el estado de Maryland, EE.UU.
“Las investigaciones muestran que hay mucho por descubrir en un juego, no importa si se es adulto”, afirma. Comienza por enlistar algunas de las actividades, alimentos favoritos y eventos destacados de tu niñez.
Y plantéate las siguientes peguntas: ¿qué se puede rescatar y añadir a tu vida actualmente? ¿Cómo pueden esas experiencias pasadas influir ahora en tu elección de una carrera o actividad profesional?
2. Arma un “mural de creatividad”. Comienza por tomar un gran tablero de corcho, rotafolios o algo parecido, y coloca en el centro las palabras “nuevo negocio”. Crea un collage de imágenes, frases, artículos, poemas y otros elementos de inspiración como sugiere Michael Michalko, autor de los libros: Los secretos de los genios de la creatividad y Thinkertoys: cómo desarrollar la creatividad en la empresa.
“La idea es que cuando te rodeas de imágenes que representan tu intención –quién quieres llegar a ser o qué quieres crear–, tu conciencia y pasión crecen”, asegura Michalko. Conforme tu collage avance y se vaya concentrando, identificarás qué le falta e imaginarás maneras de llenar los blancos y hacer realidad tu visión.
3. Haz una lista de gente que esté donde tú quieres estar. No tienes que reinventar la rueda; estudia a las personas que han tenido éxito en el área en donde buscas emprender. Por ejemplo, durante la recesión, mucha gente se alejó del mercado de bienes raíces porque pensó que era un callejón sin salida.
Levit cree que es el momento perfecto para meterse cuando la mayoría se está alejando, porque sin importar de qué negocio se trate, hay quienes tienen éxito en él. Analízalos, comprende cómo y por qué son capaces de seguir teniendo éxito cuando todos se están dando por vencidos y luego, establece las estructuras para emularlos. “Si quieres ser creativo, traza un plan riguroso y formal”, señala el experto de Annapolis. “No es el plan la parte creativa: más bien es el proceso por el que pasas el que te abre tantas posibilidades”.
4. Comienza a hacer lo que amas. Incluso, sin un plan de negocios. Mucha gente espera hasta que tiene un extenso documento por escrito, junto con inversionistas deseosos de darle dinero a manos llenas… Pero sus ideas nunca llegan a ver la luz del día, dice Cath Duncan, experta en creatividad y consejera que trabaja con emprendedores y otros profesionales en Calgary, Canadá.
Ella recomienda emprender en aquello que disfrutas, incluso si todavía no se te ha ocurrido cómo capitalizarlo. Haz la prueba de lo que podría ser el hecho de trabajar en un área que te apasione, construye tu red de negocios y pide retroalimentación, la cual te ayudará a desarrollar y afinar tu plan de negocios.
Esta es una manera de mostrar no sólo el valor que aportarás, sino que también te permitirá obtener testimonios para arrancar tu empresa cuando estés listo para hacerlo oficialmente. “Sin embargo, quizá lo más importante es que te alejará de la parálisis y el temor”, agrega Cath.
5. Toma un respiro. Haz a un lado el pensamiento empresarial. Aunque podrías sentirte incómodo, en ocasiones la mente necesita descansar de ese canal de pensamiento, advierte Levit, quien recientemente comenzó a escribir haiku, una forma poética japonesa. Tal vez a ti te funcione la escritura creativa, la pintura, correr o la jardinería.
Luego de que te tomes unas vacaciones mentales (consintiéndote con algo que te apasione), puedes iniciar o retomar un diario y poner por escrito todos los proyectos de negocios que acudan a tu mente. Te sorprenderá cuán renovadas y frescas estarán tus ideas. Mirar cosas hermosas –arte y naturaleza– crea conexiones que a menudo pasamos por alto. Regístralas, cáptalas mediante la escritura y úsalas
Autora Lisa Girard
Fuente http://www.soyentrepreneur.com/descubre-tu-pasion.html