“Los empresarios estadounidenses disfrutarán del mismo tratamiento que el ofrecido a los del resto del mundo que hoy mantienen vínculos con la Isla. Es cierto que vemos con buenos ojos —cuando las leyes norteamericanas lo permitan—, que ellos puedan comerciar e invertir; pero eso no implica un trato preferencial”, explicó a periodistas de la AIN.
Los empresarios norteamericanos siempre han tenido intereses comerciales en el mercado cubano, y en un futuro “esperamos que puedan venir sin la presión de las restricciones establecidas por el bloqueo, cuyo levantamiento no solo es una solicitud de Cuba, sino un reclamo de la comunidad empresarial estadounidense y mundial”, comentó.
“Aunque el Presidente de los Estados Unidos no puede eliminar el bloqueo, este posee amplias prerrogativas —más allá de las medidas aprobadas en enero último—, que pudieran contribuir con pasos sustantivos al avance hacia una normalización de las relaciones bilaterales”, enfatizó.
Entre las posibles medidas destacó la autorización a Cuba para usar el dólar en sus operaciones financieras en el exterior. “Hoy no podemos utilizar esa moneda de referencia internacional en ninguna de nuestras transacciones en el extranjero”.
Mencionó también la aprobación de determinadas licencias para posibilitar la exportación de productos cubanos a los Estados Unidos. “Más allá de renglones tradicionales como el ron y el tabaco, existen otros de excelente factura que pueden incluirse en ese posible intercambio, como los derivados de la biotecnología”.
Prueba de esto fue la autorización para emplear en ensayos clínicos dentro del territorio estadounidense el Heberprot-P, un medicamento que en el mundo ha demostrado su eficiencia para tratar las úlceras del pie diabético, y del cual se pueden beneficiar los ciudadanos de esa nación, afirmó.
“Las medidas tomadas hasta la fecha por el presidente Obama son insuficientes y no sientan las bases para crear un terreno fértil sobre el cual avanzar. Cierto es que significan un paso favorable, pero queda mucho camino por recorrer en las relaciones diplomáticas, y en materia económica mucho más”, concluyó.