Imagen: Nicholas Stevenson
No era aún la estación de la sangre
Nosotrosno debimos saberloen el asombro del recreo
pero ellas tomadas de la manodibujabandolorosos rubíes por sus piernas
un camino de joyasdesprendidodel fruto lastimado
No debimos saberlo en el recreo
Todavía no es la estación de la sangrey ya estamos perdidas en un bosque
Mamá cómo decirteque este animal que nos descorazonaes el mismo que enredatu corazón a un yugocada noche
y que en nosotras un día y otrodías y otro díahorada un desfiladero que nos duelepara ocultar su filo
Aunque no sea la estación de la sangreél la hace restallaren las paredes de los muslos
Mamá cómo decirtetu amor nos amordaza
La trampa está en sus besosque bajan de la frentedesde el ombligo bajany enhebran una hilerade cristalitos rojosahogados en venenodetrás de su saliva
Mamá un padrecazadornos acorrala
y somos
animalitos ciegos
sangrando en el recreo