Por: Hugo Rizzo 20 Julio, 2018
Cuantas veces, en el camino del andar, nos ganan las nostalgias del volver... nos desafia lo nuevo. Los desafios, los hijos, el correr de cada dia... sin embargo no se puede dejar de cerrar los ojos y sentir los olores y los lugares de los que venimos, nuestros padres, nuestros hermanos, nuestros juegos de niños... amigos que van quedando en el camino... y sin embargo siguen presente en nuestro pensar. aquella o aquellas primeras casas donde vivimos, las escuelas, los pies descalzos de los juegos de niños... y cuando intentamos irnos de ellos vuelven cual sombra que nos sigue como una marca personal a cada lado y volvemos a sentir el aroma de aquellos lugares en donde nos sentimos, nos identificamos. y en esos lapsus de nostalgia... que parecerian estar detenidos o al menos no controlados en ese instante porque el tiempo nos atrapa... volvemos una vez mas y seguimos... andando el camino!