El otro día fui a mi centro de salud por mi segundo y reciente embarazo. Pedí cita a primera hora, si no era así prefería ir otro día, para no llegar muy tarde al trabajo.Me citaron a las 8.42h. Me hace gracia la precisión de los minutos, como si fuesen tan puntuales. Vaya por delante que odio la impuntualidad y enseguida me pongo nerviosa, me parece una falta de educación y respeto.Entiendo que en la consulta del médico puede haber alguna visita más larga de lo habitual y algún retraso, entra dentro de lo probable y normal. Pero empezando la consulta a las 8.30h y teniendo yo cita sólo 10 min después, me atendieron con 50 minutos de retarso. Además mientras esperaba tuve que ”pegarme” con una abuelilla que se quería colar echándole bastante morro y poca educación, y con los representantes de productos farmacéuticos, responsables del retraso, que pretendían seguri pasando. Esto último me pareció totalmente increíble. ¿Por qué no visitan al médico antes de la consulta o cuando termina? ¿Por qué se tienen que colar y hacernos esperar a los que estamos allí con nuestra cita, además para algo que no tiene nada que ver con la consulta? ¡Uf! No si son los cambios de humor por mi embarazo , pero me puse a cien.Otro detalle fue en la consulta de al lado. Dos enfermeras salían con sus bolsos y abrigos para irse a tomar algo, supongo. Al salir encontraron a una persona esperando, y en lugar de atenderla, le dijeron: “Tendrás que esperar cinco minutos”. Esta entrada es un poco rollo, igual resulta un aburrimiento, pero me he desahogado. Yo prefiero la sanidad pública a la privada, pero está masificada y mal organizada, y con la poca paciencia que tengo (es un defecto mío) me desespero. Además, la visita sólo sirvió para confirmar el test de embarazo y que me derivaran a obstetricia, donde por cierto no me dieron cita y me dijeron que "ya me llamarán".