Título: En el país de la nube blanca.
Autora: Sarah Lark.Páginas: 752.ISBN: 978-84-666-4671-0.PVP: 21.00 €.
Aunque esta novela ya está reseñada en el blog, por mi compañera Dácil (AQUÍ), es tan espectacular que no podía pasar sin dejar mi pequeño comentario sobre ella.
Una inolvidable saga familiar en el exótico marco deNueva Zelanda.
Londres, 1852: dos chicas emprenden la travesía en barco hacia Nueva Zelanda.Para ellas significa el comienzo de una nueva vida como futuras esposas de unoshombres a quienes no conocen. Gwyneira, de origen noble, está prometida al hijode un magnate de la lana, mientras que Helen, institutriz de profesión, ha respondidoa la solicitud de matrimonio de un granjero. Ambas deberán seguir su destino enuna tierra a la que se compara con el paraíso. Pero ¿hallarán el amor y lafelicidad en el extremo opuesto del mundo?
"En el país de la nube blanca", el debut más exitoso de los últimosaños en Alemania, es una novela cautivante sobre el amor y el odio, laconfianza y la enemistad, y sobre dos familias cuyo sino está unido de formaindisoluble.
Da igual queGwyneira sueñe con caballos, ganado, y una vida libre, donde pueda criar a susperros, montar a horcajadas y ser feliz, y que Helen anhele haber encontrado asu alma gemela, con la que conversar acerca de sus novelas favoritas, y tenermuchos hijos a los que amar. Son iguales. Sus destinos se unieron a bordo de“El Dublín”, y sus futuros estarán ligados.
Nuestras protagonistasson guerreras. Aunque no tengan pistolas o lanzas. No lleven pantalones, nisean forajidas. Son unas mujeres de armas tomar. Harán lo que sea necesariopara sobrevivir, pese a que todo esté en su contra. Y aunque a veces seaimposible “poner al mal tiempo buena cara”, lucharán y vencerán.
No puedo decirque una sufrió más que otra. Las dos tuvieron lo suyo. No puedo contarles todolo que me gustaría, porque desvelaríademasiado…. Lo que si puedo decir es queyo me sentí mucho más identificada con Gwyn, y sus capítulos me parecieron másamenos y divertidos…
Aunque Gwyny Helen son las protagonistasindiscutibles de esta novela, algunos de los secundarios fueron, y son, importantísimospara el desarrollo de la trama, así como para hacer las delicias de loslectores, y mis ojitos en particular. Si tuviera que destacar alguno, sería amí James McKenzie, que no solo se llama como mi personaje favorito de novelaromántica, sino que además, me ha recordado mucho a él.
Poco a poco nosembarcaremos en un viaje sin rumbo, y sentiremos que Gwyn y Helen se conviertenen nuestras amigas, mientras viajamos por “El país de la nube blanca”.
Mientras pasoel rato con lecturas que poco significaran para mí cuento los días hasta que sepublique el segundo libro de esta magnífica serie, de la que aclaro, que pese aser un 5/5 tiene un poco menos de notapor una escena robada, de un reencuentro que solo habita en mis sueños.